En cambio, el interés del bono alemán del mismo plazo -cuya diferencia con el español mide la prima de riesgo- se ha reducido del 0,757 % previo al 0,750 %, aunque sigue en niveles máximos de septiembre de 2015.
Así, la combinación del menor rendimiento del bono de referencia germano con el mayor interés del español explica que el riesgo país nacional haya cerrado al alza, en una jornada en la que el Tesoro ha captado más de 4.000 millones de euros en deuda a corto plazo, y con rentabilidades en mínimos históricos.
En el caso de las letras a seis meses el interés ha sido del -0,470 %, mientras que en las letras a doce meses ha alcanzado el -0,415 %.
En los mercados bursátiles continúa dominando la volatilidad y la mayoría de plazas europeas ha terminado la sesión con importantes caídas que, según los analistas, alimentan el apetito inversor en los mercados de deuda, donde algunos bonos de referencia están en cotas "muy altas", como es el caso del alemán y el estadounidense.
El detonante de la salida de capital de la renta variable ha sido la publicación de la inflación de enero en el Reino Unido, que se situó en el 3 %, frente al 2,9 % que esperaban los expertos, lo que hace temer a los mercados un adelanto en la subida de los tipos de interés.
En cuanto al resto de países considerados periféricos de la zona euro, la prima de riesgo italiana ha aumentado seis puntos básicos, hasta 134, mientras que la portuguesa se ha elevado hasta 139, frente a los 132 del registro anterior.
En Grecia, el riesgo país ha cerrado en 363 puntos básicos, diez más que el lunes y la cota más alta de 2018.
Los seguros de impago de la deuda española ("credit default swaps"), cantidad que debe pagarse para garantizar una inversión de 10 millones de dólares, se han encarecido hasta 96.410 dólares, en comparación a los 158.310 dólares que pagan los italianos.