Según el Flash del Índice PMI Compuesto de la Actividad Total de la Zona euro de Markit, el indicador bajó de 58,8 en enero a 57,5 en febrero.
La actividad empresarial siguió expandiéndose a un ritmo intenso y las presiones de los precios y el crecimiento del empleo también se mantuvieron elevados, aunque con una desaceleración que derivó en un menor aumento de los nuevos pedidos.
A pesar de ralentizarse, el crecimiento de nuevos pedidos alentó a las empresas a reforzar su plantilla, con un aumento del empleo en el sector servicios en máximos de la década, en tanto que en el sector manufacturero descendió hasta registrar la mínima de los últimos cinco meses.
Según Markit, los pedidos pendientes siguieron acumulándose, lo que indica la falta de capacidad de las firmas para hacer frente a la demanda aunque estos retrasos fueron los menores del último semestre.
Asimismo, el optimismo de las empresas con respecto a los próximos doce meses alcanzó el máximo desde 2012, con un panorama mucho más positivo en el sector servicios que en el manufacturero.
Por países, el crecimiento económico en Alemania fue el menor de los últimos tres meses, mientras que en Francia marcó la mínima en cuatro, aunque en ambos casos las cifras evidencian un crecimiento "robusto".