El índice referencial Nikkei registró un retroceso de 974,13,02 puntos, un 4,51 por ciento, hasta situarse en las 20.617,86 unidades, mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, perdió 62,45 puntos, un 3,62 %, hasta situarse en las 1.664,94 unidades.

El parqué tokiota comenzó la jornada con pérdidas agudas a la estela la caída de la víspera de la Bolsa de Nueva York, se situó hacia mitad de sesión por debajo de la barrera psicológica de los 21.000 puntos, y llegó a hundirse por momentos más de 1.000 puntos o un 5 por ciento.

La caída del Nikkei es la más fuerte desde el pasado 6 de febrero, y responde al nuevo paquete de aranceles a productos chinos anunciado en la víspera por el presiente estadounidense Donald Trump, que ha disparado el nerviosismo en los mercados por una posible guerra comercial entre las dos mayores potencias mundiales.

"Los inversores están preocupados por una posible caída del comercio global y una ralentización del crecimiento económico", señaló el analista Maki Sawada, de Nomura Securities, en declaraciones a la agencia local Kyodo.

El anuncio de EEUU también ha empujado la cotización del dólar hasta los 104 yenes, su nivel mínimo respecto al yen de los últimos 16 meses, una tendencia que perjudica al músculo exportador nipón al restarle competitividad en el exterior.

Todos los sectores del parqué tokiota registraron pérdidas, encabezadas por los de la maquinaria y de los metales no ferrosos.

Destacan las caídas del fabricante de vehículos Honda Motor (5,3 por ciento), de la tecnológica Sharp (5,7 por ciento), del fabricante de maquinaria industrial y robótica Fanuc (4,4 por ciento) o del peso pesado de las telecomunicaciones Softbank (4,8 por ciento).

En la primera sección, 2.042 valores cayeron frente a 29 que avanzaron, mientras que 9 terminaron el día sin cambios.

El volumen de negocio ascendió a 3,603 billones de yenes (27.830 millones de euros), por encima de los 2,669 billones de yenes (20.403 millones de euros) de la víspera.

El parqué tokiota cerró en negativo una semana en la que han predominado las pérdidas, con la excepción de las ganancias de la víspera gracias a las compras de fondos de pensiones, y después de cerrar el miércoles por festividad nacional.

Tokio cayó el lunes y el martes debido a la apreciación del yen, así como a la crisis por la que atraviesa el Gobierno de Shinzo Abe por un escándalo de corrupción y a las pérdidas globales en los mercados de acciones tecnológicas a raíz del desplome del gigante estadounidense Facebook. EFECOM

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