Este viernes se cambia a 1,21 dólares, aunque ha llegado a caer hasta los 1,206 dólares. No marcaba un cambio tan bajo contra el 'billete verde' desde mediados de enero y prácticamente vuelve a los 1,20 dólares a los que finalizó 2017.

Todo ello, después de que en febrero llegara a escalar hasta los 1,255 dólares, que en ese momento supuso su cambio más alto desde finales de 2014. Desde entonces, la depreciación de la 'moneda única' frente a la estadounidense se acerca ya al 4%.

El estirón del dólar en la última semana, en la que acumula una apreciación próxima al 2% contra el euro, `coincide¿ con otro hito, el protagonizado por el bono estadounidense a 10 años, cuya rentabilidad ha vuelto al 3%. En 2013 y 2014 ya pisó este terreno, pero de manera momentánea, y la última vez que estuvo realmente por encima del 3% fue en 2011. El asalto al 3% incrementa el atractivo del dólar porque evidencia la brecha de rentabilidad existente entre la deuda estadounidense y la europea, con el `bund¿ alemán en el 0,58%.

Tras la reacción del dólar y tras la subida de la rentabilidad de la deuda estadounidense figuran los bancos centrales. Y las expectativas sobre sus futuros movimientos. En el caso de la Reserva Federal (Fed) norteamericana se espera que, al menos, suba los tipos de interés otras dos veces en 2018, tras haberlos elevado ya en marzo para situarlos en el 1,50-1,75%.

Estas previsiones, sin embargo, también estaban sobre la mesa cuando el euro superó los 1,25 dólares. De hecho, la debilidad del `billete verde¿, que pesaba más que la fortaleza del euro en el pulso entre ambas divisas, causaba sorpresa. ¿La sorprendente debilidad del dólar estadounidense sigue desconcertando a los mercados. Las medidas de estímulo presupuestario y las rebajas de impuestos del Presidente Trump, combinados con las subidas de los tipos de interés y el elevado crecimiento deberían haber hecho que el dólar se fortaleciera, al menos en teoría¿, subraya Lukas Daalder, Director de Inversiones de Robeco Investment Solutions, para destacar la evolución de los últimos meses. Desde comienzos de 2017, cuando se cambiaba a 1,05 unidades por euro, el `billete verde¿ aún se deprecia un 13%.  

Aunque la voz cantante en este `baile¿ la lleva el dólar, el euro también tiene algo que decir. Y lo que escucha ahora el mercado es que, tras la reunión de este jueves, sigue sin tener claro cuándo dará marcha atrás los estímulos el Banco Central Europeo (BCE). Las alusiones de su presidente, Mario Draghi, a una ¿moderación¿ del crecimiento, por mucho que matizara que se debe a ¿posibles factores temporales¿, ha dejado la sensación de que el BCE será aún más cauto de lo que se esperaba. Y de ahí también la debilidad de la divisa europea.

 

- ¿Por qué da tanto miedo el bono de EEUU en el 3%? Cinco motivos lo explican