La cautela con el `ladrillo¿ llevaba unos meses marcando el discurso de JP Morgan, entidad que cuenta con una cartera de 2,79 billones de dólares bajo gestión. Sus analistas habían asignado ya una opinión neutral a la inversión inmobiliaria en su última revisión global. Sin embargo, ha sido en el momento en el que los `treasuries¿ han rebasado la temida cota del 3% cuando sus analistas se han decidido a marcar el infraponderar en los REIT estadounidenses, la figura en la que se inspiran las socimis españolas de más reciente creación.
El veredicto de John Bilton, responsable de los 250.000 millones de dólares confiados a las estrategias de multiactivos del gigante estadounidense, es tajante. Los REIT son ¿vulnerables a nuevos repuntes de las rentabilidades¿ mientras que en comparación por el riesgo asumido ¿generan rentabilidades inferiores¿. Un escenario en el que, para el experto, ¿las valoraciones razonables no sirven¿ porque el potencial en otros activos es mayor y menor el riesgo de colapso. Y es que advierte de que ¿los inmuebles se encuentran ahora en una fase avanzada del ciclo¿.
La decisión del banco estadounidense busca adelantarse a una eventual huida más generalizada que podría llegar tan pronto como los bancos centrales endurecieran sus políticas monetarias más adelante en el año. Es así que el informe subraya que si bien ¿la Reserva Federal (Fed) todavía no ha emprendido acciones para eliminar definitivamente el estímulo ni esperamos que lo haga este año [¿], los inversores serán sensibles a cualquier dato que pueda acelerar el ritmo de las subidas de tipos¿.
En la misma línea de discurso, JP Morgan ha decidido infraponderar también sus posiciones en renta fija corporativa estadounidense con grado de inversión. ¿Los diferenciales son estrechos¿ con respecto a los papeles públicos de mayor solvencia, explican, con lo que prevén que es probable que ¿los compradores regresen a los valores de deuda pública¿, mientras que el mercado de corporativos podría perder liquidez en medio de un clima de mayor recurrencia de emisiones para aprovechar a financiarse con los últimos coletazos del entorno de tipos al 0%.
Ambas recetas se presentan como un antídoto a la volatilidad de unos mercados que -¿resulta irónico¿, según el informe- se muestran preocupados con la posibilidad de que los bancos centrales ¿actúen de forma tardía¿, cuando hasta ahora la gran preocupación había sido que fuesen capaces de normalizar la inflación. Cosa que la Reserva Federal ha conseguido convenientemente a juicio del gigante de Wall Street.
A pesar del cambio de guion que podría suponer el relevo al frente de la Fed del pasado febrero, cuando Jerome Powel se hizo con la presidencia de la institución, JP Morgan mantiene sus previsiones: ¿Subidas de 25 puntos básicos de los tipos estadounidenses cada trimestre hasta finales de 2019¿. Un ritmo que, según el informe, ¿no debería hacer perder los papeles a los mercados¿, pero sí que suficiente para reconsiderar posiciones en un `ladrillo¿ que en economías donde la retirada de estímulos no está tan avanzada sigue siendo opción preferencial de inversión.