El incremento, levemente superior al esperado por los economistas del 0,6%, se debió principalmente al sector manufacturero, que creció un 0,5%, y al de la de minería, que incluye gas y petróleo, un 0,1%.
Por su parte, la producción de automóviles registró un descenso del 1,3%.
Con estas cifras, en los últimos doce meses la producción industrial estadounidense ha avanzado un sólido 3,5%.
Las fábricas estadounidenses también aumentaron en abril la utilización de su capacidad instalada de producción, al pasar del 77,6% el mes anterior a un 80%.