La FCA detectó que la mayoría de las siete empresas de gestión automatizada de inversiones examinadas ofrecían información "poco clara" sobre comisiones, además de mostrar comparaciones "potencialmente engañosas" entre el coste de sus servicios y los de sus competidores.
Asimismo, muchas de estas firmas no evaluaron de manera apropiada los conocimientos y experiencia, así como los objetivos de inversión y la capacidad de absorber pérdidas de sus clientes.
"Algunas firmas no preguntaron en absoluto a sus clientes sobre sus conocimientos y experiencias, ya que consideraban su servicio adecuado para todas las personas independientemente de sus conocimientos sobre inversión", señala el regulador.
En cuanto a las empresas de asesoría examinadas por la FCA, la agencia dijo no estar satisfecha con la solidez de la recopilación de información sobre los clientes y sus circunstancias financieras, subrayando que las entidades deberían considerar cómo mejorar la cantidad y calidad de la información recogida durante el proceso de asesoría automatizada.
Asimismo, la FCA constató debilidades a la hora de detectar y prestar soporte a clientes vulnerables, señalando que en algunos casos los servicios ofrecidos dependían de que el propio usuario se autoidentificara como vulnerable.
"Esperamos que los servicios de inversión automatizada cumplan los mismos estándares regulatorios que los servicios tradicionales. Esto supone adoptar una aproximación proporcionada a la recopilación de datos a la vez que se mantiene un nivel adecuado de protección de los clientes", añadió el regulador.