En el conjunto de mayo, el Ibex se ha dejado 5,2% y ha reculado hasta los 9.465 puntos, su nivel más bajo desde marzo. No se trata del peor mes del año, puesto que en febrero corrigió un 5,2%, pero sí del peor mayo desde 2012. Y ese precedente no es uno cualquiera, puesto que en mayo de 2012 empezó el momento más tenso de la crisis para España. 

Fue en mayo de 2012 cuando Rodrigo Rato dimitió como presidente de Bankia y le relevó José Ignacio Goirrigolzarri; cuando se destapó un agujero de más de 20.000 millones de euros en la entidad, que desembocó en que España pidiera en junio un rescate a Europa para sanear el sector bancario; y fue a partir de mayo cuando la bolsa española se hundió de manera definitiva -en julio el Ibex cayó hasta los 6.000 puntos- y la prima de riesgo se calentó al máximo -en julio superó los 650 puntos básicos-, hasta el punto de que por España se disparó el temor a que el euro se rompiera, algo que obligó al presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, a adquirir su histórico compromiso de "hacer todo lo que sea necesario" para salvar a la 'moneda única'.

Eso sí, el terremoto de mayo de 2012 dejó un roto mucho mayor que el sufrido ahora. Entonces, el Ibex se dejó un 13%.

Ahora ha corregido más de un 5%, aunque en la segunda quincena de mayo el descalabro se ha acercado al 8%. Esta brusco viraje bajista responde al retorno de la prima de riesgo política a la Eurozona, con Italia en un papel claramente protagonista y con España también en el foco tras la moción de censura presentada por el secretario general del Partido Socialista, Pedro Sánchez.

Con la fuerte caída de mayo, el Ibex ha cerrado en negativo tres de los cinco meses consumidos ya en 2018. En enero sumó un 4,1%; en febrero bajó ese 5,8%; en marzo cayó un 2,4%; en abril remontó un 4%; y con el descenso de mayo, el marcador acumulado en 2018 refleja unos 'números rojos' del 5,8%.

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