"A la luz del robo de propiedad intelectual y tecnológica y otras prácticas comerciales injustas, EEUU implementará un arancel del 25 % sobre 50.000 millones de dólares de productos de China que contienen tecnologías industrialmente significativas", señaló la Casa Blanca en un comunicado.
"Estos aranceles", agregó la nota, "son esenciales para prevenir mayor transferencias injustas de tecnología y propiedad intelectual estadounidense a China, y que protegerán empleos en EEUU".
El presidente tomó la decisión en una reunión este jueves en la Casa Blanca con su secretario de Comercio, Wilbur Ross; su secretario del Tesoro, Steven Mnuchin; y su responsable de Comercio Exterior, Robert Lighthizer.
Trump avanzó en marzo sus planes de imponer aranceles por 50.000 millones de dólares a China por el déficit comercial de Washington respecto a Pekín, e inició así un periodo de confrontación comercial entre las dos mayores economías del mundo.
El Gobierno de Trump identificó entonces unos 1.300 productos chinos a los que planeaba gravar en una lista en la que incluyó aparatos de tecnología punta de las industrias aeroespacial y robótica.
Estos aranceles se sumarían a los ya impuestos por Trump a nivel mundial a las importaciones de acero (25 %) y aluminio (10 %).
Pekín ya ha señalado que responderá estas medidas proteccionistas con acciones recíprocas y que quedarán anulados los acuerdos alcanzados en esta materia tras dos meses de negociaciones con Washington.
"Nuestra posición sigue siendo la misma, si EEUU toma medidas unilaterales y proteccionistas que dañen los intereses chinos responderemos inmediatamente tomando las decisiones que sean necesarias para salvaguardar nuestros legítimos derechos e intereses", añadió el portavoz de Asuntos Exteriores chino, Geng Shuang, en rueda de prensa.