Así lo ha señalado durante el VI Foro Anual del Consejero organizado por KPMG, IESE y 'El País', en el que ha explicado que hay dos tipos de criptomonedas, las puras como el bitcoin, y las que pretenden actuar como valores neociables. "Lo que defendemos es que el régimen debe ser homogéneo con el de los valores y que, por tanto, la CNMV como supervisor de valores debe tener competencias al respecto", ha indicado.
La regulación de criptoactivos debe responder, por definición, a un régimen internacional, por lo que la CNMV está siendo "muy activa" en los foros internacionales como ESMA, la autoridad europea de valores.
"Nosotros, hasta ahora, hemos estado proyectando nuestra actividad solo respecto a los valores representados por medio de títulos y anotaciones en títulos y hay que hacer un poco de esfuerzo interpretativo", ha asegurado el presidente del organismo.
Albella considera que las criptomonedas que no son puros depósitos de valor -como el bitcoin-- "deben ser consideradas como valores negociables y cumplir con las mismas reglas". En este sentido, ha reconocido que existen "ciertos desajustes" en la normativa debido a que se trata de un fenómeno nuevo, por lo que están trabajando a nivel europeo para abordar esta circunstancia de un modo "coordinado".
La CNMV y el Banco de España trabajan conjuntamente para estudiar el fenómeno de las criptomonedas con el fin de examinar si existen posibilidades para abordar esta realidad o si es necesario proponer propuestas regulatorias ante posibles "agujeros normativos".
El supervisor apuesta por equiparar la protección al consumidor en relación con las criptomonedas a las normas de protección dadas al consumidor de valores de inversión.