La caída se debió, en su mayor parte, al recorte de los créditos impagados que bajaron a 81.553 millones de euros a finales de mayo desde los 82.635 millones del mes anterior.

Los créditos que todas estas entidades tenían concedidos cayeron ligeramente, ya que sumaban 1,2194 billones frente a casi 1,2198 billones del mes anterior.

La positiva evolución de la morosidad se nota aún más en comparación con el mismo mes del año pasado, cuando era dos puntos porcentuales más elevada y se situaba en el 8,74 %.

La ratio de mora del sector financiero, aunque aún es elevada, mejora poco a poco al compás del desendeudamiento de familias y empresas y del dinamismo de la economía y el empleo, con lo que se aleja cada vez más del máximo histórico del 13,61 % de diciembre de 2013, pese a lo que ha empeorado en varias ocasiones puntuales.

La morosidad agregada del sector de bancos, antiguas cajas y cooperativas, que el Banco de España presenta separada de la de las financieras de consumo, se situó en mayo en el 6,70 %, mejor que el 6,79 % del mes anterior, después de que los dudosos se redujeran hasta los 78.151 millones desde los 79.245 millones de abril.

En comparación con mayo de 2017, la caída es de algo más de dos puntos porcentuales, ya que entonces la morosidad era del 8,83 %, frente al 6,70 % del mismo mes de 2018.

Los tres tipos de entidades sumaban a cierre de mayo un volumen de impagos de 78.151 millones de euros, para una cartera total de 1,166 billones, ligeramente inferior a un mes antes.

Por último, las financieras de consumo terminaron mayo con una tasa de morosidad del 5,96 %, la misma que registra desde marzo, debido a que el incremento de la cartera crediticia compensa que también aumente el saldo de dudosos.

En concreto, el "stock" de créditos de estas entidades se situó en 45.854 millones de euros frente a los 45.627 millones anteriores, en tanto que los impagados se elevaron a 2.734 millones desde los 2.720 millones de febrero. EFECOM

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