El mexicano ha explicado que la posición financiera de la cotizada facilita ahora el reparto de caja fuerte, pero que la decisión final ¿dependerá de las inversiones que se lleven a cabo en los próximos 8 o 10 meses¿. En este sentido, Slim ha defendido que cualquier paso en este sentido ha de ser ¿persistente, permanente, estable y -si se puede- creciente, porque no se puede dar marcha atrás si se da un año malo¿.

Aunque el mexicano ha evitado poner cifras y calendario al posible pago, ha señalado que ¿no sería ningún error pensar que pudiera haber dividendos el año que entra¿ gracias a la mejor posición financiera que ha resultado por la venta de un 49% de Aqualia, la filial de gestión de aguas del grupo, al fondo IFM. Sí que ha apuntado hacia el `scrip dividend¿ como la modalidad más factible, al calificarla como ¿la mejor forma por dejar al accionista que escoja si prefiere efectivo o nuevos títulos¿.

FCC suspendió su política de dividendos en 2012 por la crisis de actividad en la compañía, entonces controlada por Esther Koplowitz, que hoy ocupaba un puesto en la mesa presidencial del Investor Day aunque no ha pronunciado palabra. La decisión de retomarlo, ya con la compañía bajo la batuta de Slim y su hija, Esther Alcocer Koplowitz, se lleva retrasando desde el pasado año, cuando la compañía volvió a beneficios con 118 millones de euros.

La estructura financiera que el grupo ha conseguido a golpe de desinversión, salida de proyectos no estratégicos y refinanciación de pasivos ¿nos permitirá libertad total para el dividendo¿, ha recalcado el magnate mexicano. En este sentido, ha señalado que la estructura financiera del grupo había minado la rentabilidad de su negocio, mientras que al cierre del año pasado se alcanzó un beneficio neto de 151 millones de euros, un 168,5% más que hace un año, según la constructora dio a conocer este mismo lunes.

DISCIPLINA FINANCIERA

Por lo que se refiere a la disciplina implantada en FCC, Slim ha afirmado que el grupo constructor ¿no va a vender nada por debajo del coste¿. Uno de los 11 principios de Grupo Carso que el ingeniero ha impuesto en la española. Slim ha subrayado que desde su llegada hace cuatro años ¿se han detenido varias desinversiones de cierta magnitud que se habían planteado con anterioridad¿, refiriéndose específicamente a algunas divisiones no estratégicas de negocio, activos inmobiliarios y la filial patrimonialista Realia.

En cuanto a los objetivos de expansión del grupo, el consejero delegado Pablo Colio ha señalado como una ¿gran oportunidad¿ el plan de la Unión Europea para que los residuos no tratados que llegan al vertedero no pasen del 10% del total en el año 2030. Además, este nicho de negocio es su principal apuesta en Reino Unido, donde la tasa de renovación de contratos de servicios urbanos alcanza el 84%, porcentaje que se quiere ampliar y nutrir con nuevas adjudicaciones. En el mercado español, el `número dos¿ de la compañía ha apuntado también hacia los desarrollos ferroviarios previstos para los próximos años.

Por lo que se refiere a Realia, el principal accionista de FCC ha dejado en el aire la posibilidad de aportar a la inmobiliaria ciertos negocios del grupo matriz. Si bien ha subrayado que ¿en los proyectos de FCC no está el tener inmuebles en renta, sino para la venta¿. Así, ha destacado la oportunidad de inversión en el sector que supone la recta final de los bajos tipos de interés de la Eurozona y las grandes economías mundiales. Una ventaja que, en su opinión, los gobiernos están ¿desaprovechando¿ para hacer una más decidida apuesta por la inversión en infraestructuras.

TRANQUILIDAD ANTE NUEVA POLÍTICA

Slim se ha mostrado confiado en que las políticas de los nuevos gobiernos de Pedro Sánchez en España y de Andrés Manuel López Obrador en México mantengan una línea más continuista de lo que se descontaba en un comienzo. Para la economía española ha señalado, además, que ¿ya pasó sus peores compases, ahora toca tomar decisiones de tipo patrimonial importantes, aprovechar las tasas de interés para comprar vivienda, y si son empresarios para financiarse a estos niveles¿.

Con respecto a la situación en Cataluña, de la que el magnate latinoamericano ha dicho ¿no estar muy enterado¿, no se muestra preocupado y apuesta por seguir manteniendo la sede del grupo en esta región. Sí que dan más dolores de cabeza las amenazas de remunicipalización de servicios, que, sin embargo, ¿no han supuesto ningún impacto significativo para FCC a falta de un año para que termine esta legislatura¿, ha señalado Colio.

SIN PLAN ESTRATÉGICO A LA VISTA

En cuanto a previsiones de futuro, Slim y su equipo han rechazado dar números o apostar por un plan estratégico al estilo de otras grandes compañías. ¿No es usual que demos cifras, porque se crean expectativas. Sabemos lo que hicimos, y los ingresos razonables por los proyectos abiertos, pero es muy aventurado adelantar qué va a pasar en dos años¿, ha sentenciado el ingeniero y empresario mexicano.

Además, ha explicado que su intención es que la participación inversora en FCC sea "permanente". "Me quedaré un buen tiempo, cuanto menos toda mi vida", ha llegado a decir ante la posibilidad de que el magnate procediese a colocar una parte de su inversión con el objetivo de dotar de mayor liquidez a la compañia y facilitar su eventual reingreso en el Ibex 35.

En lo que va de año, FCC acumula una revalorización del 30% en bolsa. Una revalorización que se ha construido con cada golpe de timón de un mexicano que este martes ha provocado llenazo en la novena planta de la Torre Realia de la madrileña Plaza de Castilla, donde se ha celebrado el primer día del inversor de la compañía. Inversores, representantes de fondos, gestoras y casas de análisis junto a periodistas nacionales y extranjeros formaban el concurrido público ante el que Slim ha dado la cara y respuestas a sus preguntas cuatro años después de su desembarco en la constructora.