El Ibex 35 ha renunciado al tirón alcista de primera hora, cuando lograba ganancias superiores al 0,5%, para cerrar con caídas del 0,25% en los 9.507 puntos. Ni una mayor calma con respecto a Turquía y el riesgo de contagio a otros emergentes, ni los datos macro publicados este martes han logrado rescatar al selectivo madrileño del rojo del descenso.
Todas las miradas se han vuelto a dirigir, de nuevo, hacia BBVA, que ayer volvió a desplomarse a mínimos de dos años. Hoy su cotización ha llegado a rebotar más de un 1% hasta los 5,58 euros. Pero los inversores no terminan de ver del todo claro cómo acabará el órdago de Erdogan y el banco ha terminado sesión con caídas del 0,09% en 5,45 euros por acción.
Algunos de sus compañeros de sector se han llevado peor parte y son los que más han contribuido al cierre bajista del Ibex 35. Banco Sabadell (-1,21%) y CaixaBank (-1,19%) han sido los dos más penalizados por los inversores. El Santander ha echado el cierre en los 4,418 euros por título, con la pérdida de un 0,26% de su capitalización.
Tal y como han señalado los analistas de Link Securities, los inversores están mostrando su escepticismo con la capacidad del Banco Central de Turquía de manejar la situación. Ayer, la máxima autoridad monetaria turca se comprometió a proporcionar liquidez a las entidades de crédito del país en la medida que fuera necesario, así como a reducir los coeficientes de reservas obligatorias de las mismas. Sin embargo, no habló de la posibilidad de incrementar los tipos de interés oficiales, que es algo a lo que se opone frontalmente el presidente turco, Erdogan, y que es lo que los mercados están demandando.
Desde comienzos del mes la lira turca ha cedido el 29% frente a la divisa estadounidense (ayer volvió a perder casi un 7% frente al dólar), en lo que va de año ya lo ha hecho más del 40%, lo que dificulta en gran medida la capacidad de las empresas del país de hacer frente a sus deudas en divisas extranjeras. Esto ha provocado también el retroceso del euro por debajo de los 1,14 dólares en el convulso mercado de divisas.
La gran duda que se plantean los inversores en estos momentos es si la crisis turca es un hecho aislado o, por el contrario, se puede extender a otras economías en vías de desarrollo y provocar una crisis similar a la de finales de los años 90. ¿Creemos que es pronto para sacar conclusiones, aunque en los últimos días sí se ha podido apreciar la huida de inversores de ciertas economías emergentes, lo que ha conllevado el consiguiente castigo a divisas como el rublo ruso, el rand sudafricano, el peso mexicano y la rupia india¿, indican desde Link Securities.
No obstante, los financieros no han sido los valores que han acumulado caídas más gruesas. Este dudoso honor ha correspondido a la terna formada por Mediaset España (-4,39%), Dia (-3,41%) y Merlin Properties (-1,73%). El grupo televisivo ha sufrido un nuevo recorte de recomendación de Morgan Stanley que los inversores han seguido a pies juntillas. La cadena de supermercados ha vuelto a vivir una sesión de fuertes bandazos entre noticias sobre la participación en su capital del banco central de Noruega, el Norges Bank.
Al otro lado de la tabla de revalorizaciones, CIE Automotive ha mostrado el mejor desempeño, con un acelerón del 2,97% que ha llevado su gráfica a la cota de 25,64 euros por acción. Ferrovial (+1,14%) e IAG (0,98%) han completado el podio alcista. Amadeus ha proseguido con el repunte de ayer al ganar este martes un 0,54%. Entre los financieros, Bankia ha sido la excepción con rebote del 0,03%.
En el mercado secundario de deuda, la prima de riesgo española se ha establecido en 112 puntos básicos. Mientras que la rentabilidad exigida al bono español a diez años era del 1,45%, a los 'bunds' alemanes de referencia se les pedía únicamente tipos del 0,33%. En el apartado macroeconómico, las referencias clave del día han sido el PIB del segundo trimestre de la Eurozona y la tasa de inflación española del mes de julio.