Ese contraste puede encontrar su explicación en la celebración de las elecciones municipales y autonómicas del 29 de mayo de 2019. Los actuales alcaldes, así como los aspirantes a estas plazas, difieren poco en sus promesas en cuanto al bolsillo del ciudadano se refiere. El gancho con el que quieren embaucar a los vecinos para lograr su apoyo en las urnas es el de las bajadas de impuestos.
Algunos ayuntamientos, como los de Zamora, Castellón, Zaragoza, Sevilla o Madrid han enseñado sus cartas para empezar a jugar esta dura partida electoral. Otros esperan porque esto no ha hecho más que empezar. ¡Quedan 255 días!
Zamora ha sido una de las localidades en dar estos primeros pasos. Su concejal de Recaudación, José Carlos Calzada, anunció sus intenciones de modificar la tasa de recogida de residuos y bajar el IBI. Pretenden bajar el tipo al 0,477 para las tres categorías (urbano, rústico y especial).
Esto supondría que en las categorías de rústico y especial será el más bajo de las capitales de provincia de Castilla y León, mientras que en el IBI urbano solo habrá una capital de provincia con un tipo más bajo. En 2018 el tipo impositivo se encuentra en un 0,501.
El Gobierno municipal de Zaragoza en Común (ZeC) en el Ayuntamiento de Zaragoza también ha aprobado el proyecto de ordenanzas municipales para 2019 que recoge una bajada del tipo impositivo general del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) del 0,64 al 0,42, lo que supondrá que el recibo de este impuesto en viviendas, locales, pequeños comercios, talleres e industrias disminuirá entre un 3 y un 12%.
A ellos se suma la alcaldesa de Castellón. Amparo Marco ha solicitado a la Gerencia Territorial del Catastro una nueva bajada del 9,3% en el valor catastral de los inmuebles. Es la segunda revisión catastral consecutiva que pide este gobierno municipal para rebajar la factura del IBI, que se calcula con los valores catastrales.
Igualmente el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha anunciado que en los próximos días presentará una propuesta de ordenanzas fiscales a los grupos políticos del Ayuntamiento para conseguir una reducción de la presión fiscal para los ciudadanos de hasta un 10%. Durante una visita a las obras de restauración de la fachada del Pabellón Real, el primer edil hispalense ha informado que el gobierno municipal pretende que, a la bajada del IBI del 3% ya acordada con Ciudadanos en los presupuestos, se le sume otro 5% para el año que viene, así como una bajada del 7% en el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (Icio), un 1% en el tipo incrementado del IBI que afecta a medianas y grandes empresas y, por último, la congelación de las tasas.
Los guiños electorales desde el Ayuntamiento de Madrid se centran, por ahora, en la posibilidad de negociar unas ordenanzas fiscales para 2019 que bonifiquen en el IBI aquellos inmuebles que instalen paneles solares.
En Badajoz, su alcalde, Francisco Fragoso, promete una rebaja en el recibo del agua para las casas con tres hijos o más a partir del año que viene.
El Ayuntamiento ha decidido rebajar la factura del consumo de agua potable de las familias numerosas de la ciudad. Lo hará eliminando la subida estipulada en la tarifa general cuando se supera el primer tramo de consumo (a partir de 30 metros cúbicos de agua al trimestre).
El bolsillo de los vecinos de Murcia notará el próximo año la congelación de los impuestos, tasas y precios públicos. Así lo establece la ordenanza fiscal del Consistorio para 2019. ¿Es un compromiso del equipo de Gobierno mantener congelados los impuestos y tasas y que no sufran subidas en 2019», por lo que la única variación será la del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) debido a la actualización del valor del suelo del municipio que realizó el pasado mes de julio el Catastro, dependiente del Ministerio de Hacienda.