Inversores tensos se inclinaron por el dólar, con especuladores incrementando sus apuestas alcistas sobre la moneda estadounidense a su nivel más alto desde diciembre del 2016 la semana pasada.
El avance del billete verde fue limitado por un tercer día de pérdidas en Wall Street, generado por la ansiedad sobre la disputa comercial entre Washington y Pekín y el incremento de los retornos de los bonos del Tesoro estadounidense.
"Lo que ha pesado sobre los mercados en general ha respaldado al dólar: alza de tasas en el mundo tanto por razones de fundamento o de preocupación", dijo Joe Manimbo, analista de Western Union Business Solutions en Washington. "Las tasas del endeudamiento italiano han escalado, señal de la preocupación de los inversores por la crisis de deuda del país", agregó.
El lunes, el retorno de la deuda italiana a 10 años avanzó casi 20 puntos básicos a un 3,60 por ciento, el mayor nivel en cuatro años y medio.
El viceprimer ministro italiano, Matteo Salvini, en una conferencia de prensa conjunta con la líder de la extrema derecha francesa Marine Le Pen, denunció al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y al comisario económico, Pierre Moscovici, como enemigos de Europa.
El euro bajó un 0,26 por ciento a 1,1490 dólares, no muy lejos de un mínimo en más de un año a 1,1355 dólares que tocó a mediados de agosto. También cayó un 0,92 por ciento a 129,790 yenes.
El yuan, en tanto, cerró la sesión oficial en su nivel más bajo en siete semanas, a 6,9315 yuanes por dólar, a pesar del último intento de Pekín por calmar las preocupaciones de los inversores sobre la guerra comercial con Estados Unidos.
El banco central de China anunció el domingo una profunda reducción en el nivel de efectivo que los bancos deben conservar como reservas, en el cuarto recorte del año. * Mientras, el dólar reafirmó su marcha alcista sustentada en datos económicos optimistas y la demanda de refugio en medio de temores geopolíticos. El índice dólar subía a 95,744.