Por Paula Mercado, directora de Análisis de VDOS

Las últimas estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre el crecimiento económico global y la subida de los rendimientos de los bonos tuvieron su impacto en las bolsas. El S&P 500 y el Dow Jones registraron, liderados por las tecnológicas, sus mayores retrocesos desde febrero. Al mismo tiempo, el índice VIX de volatilidad avanzó un 44% hasta los 22,96 puntos. Tampoco fueron de gran ayuda las declaraciones del presidente de EEUU sobre que la Reserva Federal se había vuelto ¿loca¿ por su continuada subida de tipos.

En este entorno de mercado, los inversores han variado sus posiciones hacia la renta fija para evitar el brusco repunte de la volatilidad. Del grupo de fondos que invierten en este tipo de activo, el mayor volumen de entradas netas se registraba la semana pasada en la categoría VDOS de deuda privada global. Aunque la categoría no consigue anotarse ganancias por rentabilidad en el año, algunos de sus fondos sí lo hacen.

La mayor revalorización de los fondos de esta categoría, con calificación cinco estrellas de VDOS, corresponde a la clase R de capitalización en dólares de Goldman Sachs Opportunistic Corporate Bond Portfolio, que obtiene una rentabilidad desde enero del 6,02%, con una revalorización del 4,39% a un año, periodo en que registra un dato de volatilidad del 6,82%. Referenciado al índice BofA ML USD LIBOR 1-month Constant Maturity, invierte mayoritariamente en valores de renta fija de emisores corporativos domiciliados en cualquier parte del mundo.

Con un patrimonio bajo gestión de 7,29 millones de euros, sus mayores pesos en cartera corresponden a la posición larga en Br211397 IRS USD R V 03mLibor 1 (19,4%) y la posición corta en Br211397 IRS USD P F 2.25000 2 (-18,63), además de Letras del Tesoro de EEUU (13,83%), en BWAY Holding Company 5.5% (1,87%) y ViaSat 5.62% (1,83%). La suscripción de la clase A de capitalización en dólares de este fondo requiere una aportación mínima inicial de 5.000 dólares (aproximadamente 4.324 euros), con una comisión fija del 0,7% a sus partícipes.

El fondo Amundi Bond Global Corporate se revaloriza un 2,04% en el año y un 1,69% en el último periodo anual, con un dato de volatilidad de 2,40% en su clase AU de capitalización. Toma como referencia de gestión el índice Merrill Lynch Global Large Cap Corporate $ Hedged (con cobertura en dólares) y tiene como objetivo superar al índice de referencia en un período de tres años. Para ello, invierte principalmente en bonos de empresas de todo el mundo, como títulos garantizados por hipotecas (MBS) y títulos garantizados por activos (ABS).

Con un patrimonio bajo gestión de 466 millones de euros, sus mayores posiciones incluyen emisiones de JP Morgan (3,48%), Citigroup (2,61%), AT&T (2,41%), Bank of America (2,17%) y Ford Motor Credit (2,08%). No se requiere invertir una cantidad mínima para suscribir la clase AU de capitalización de este fondo, que aplica una comisión fija del 0,8%, además de un 20% variable sobre resultados positivos entre el fondo y su índice de referencia.

Con calificación cuatro estrellas de VDOS, el más rentable de esta misma categoría es la clase A en dólares de MSIF Global Asset Backed Securities con una revalorización de 4,48%. En el último año, su rentabilidad es de 3,35%, con un dato de volatilidad del 7,56%. Su cartera incluye títulos de deuda emitidos por agencias gubernamentales e instituciones privadas, correspondiendo al menos un 50% de los activos a valores con calificación de grado de inversión. Emisiones de Pagarés de EEUU, US 5yr Note Dec 18 (16,98%) y bonos US Long Bond Dec 18 (5,11%), así como emisiones de la Agencia Federal Hipotecaria Federal National Mortgage Association 3,5% (3,73%) y Federal National Mortgage Association 4% (3,06%) y pagarés US 2yr Note Dec 18 (2,65%) representan las mayores posiciones en su cartera. No es necesaria una aportación mínima para suscribir este fondo, que grava a sus partícipes con una comisión fija de 1%.

Las empresas de todo el mundo se han aprovechado de la facilidad de acceso a financiación barata durante la última década, no sólo para financiar sus inversiones sino también para aumentar sus dividendos y recompras. Al aumentar los tipos de interés, les resultará ahora más caro financiar su deuda, lo que incidirá en sus beneficios y podría afectar a la calidad del crédito.