Wall Street no logra borrar las fuertes pérdidas del viernes, sino todo lo contrario, y comienza una nueva semana en rojo con pérdidas del 2,3% para el Dow Jones, que se coloca en 25.387 puntos, tras restar 600. Por su parte, el S&P 500 cede un 2% hasta los 2.726 enteros, mientras que el tecnológico Nasdaq se deja un 2,8% a 7.200 puntos, su peor sesión en tres semanas.

El dólar ha alcanzado su máximo en 16 meses mientras que la libra se ha hundido por temores sobre el Brexit.

Con la temporada de resultados prácticamente finiquitada, el temor sobre la evolución de la economía global vuelve a estar sobre la mesa, esta vez por la abrupta caída que los precios del crudo han registrado en las últimas semanas.

Los inversores temen que la variable del petróleo haya entrado en territorio bajista tras desplomarse más de un 20% en apenas mes y medio. ¿Mientras que muchos analistas achacan esta caída al exceso de oferta, con los tres mayores productores (Rusia, EEUU y Arabia Saudita) produciendo a niveles cuasi de récord histórico, otros muchos achacan la corrección a la debilidad de la demanda por la ralentización del crecimiento económico mundial, algo que es evidente que está ocurriendo en muchas economías emergentes y en la misma Zona Euro¿, indican los analistas de Link Securities.

El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró es lunes con un descenso del 0,43% y se situó en 59,93 dólares el barril tras otra sesión a la baja, la undécima consecutiva en la mayor racha histórica negativa desde hace 34 años en que se registran estos datos.

Poco antes del cierre del mercado y en un mensaje en su cuenta en Twitter, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que "con suerte, Arabia Saudí y la OPEP no cortarán la producción de petróleo", a lo que agregó de forma exclamatoria: "¡Los precios del petróleo deben ser mucho más bajos basados en la oferta!".

Los expertos apuntan, de hecho, a que de momento la única economía que mantiene el pulso es la estadounidense, favorecida por la política fiscal expansiva implementada por la Administración Trump. Sin embargo, en un entorno de debilidad económica global, los inversores pueden temer que bancos centrales más allá de la Reserva Federal (Fed) apuesten por la retirada de estímulos de forma algo contraproducente frente a la desaceleración económica esperada.

En el apartado empresarial, los inversores siguen muy pendientes de la evolución de los títulos de General Electric, que se desploma un 7% hasta los 7,98 dólares después de dejarse un 6% el viernes, cerrando en su nivel más bajo desde marzo de 2009. La compañía se vio golpeada por la decisión del analista de JP Morgan Chase, Stephen Tusa, de recortar su precio objetivo de 10 dólares a 6 dólares por título.

En el lado de las pérdidas destaca la fuerte caída del 5% de Apple, caídas que alcanzan más del 2% también para Google o Facebook. Las acciones de otro gigante como Alibaba caen un 1,4% hasta los 142,7 dólares gracias a las fuertes ventas de la compañía durante la celebración del Día del Soltero este domingo en China, con más de 30.800 millones de dólares vendidos en 24 horas, por encima de los 25.300 millones que vendió el pasado año.