De los casi 3.000 millones de euros emitidos este martes, la mayor parte, 2.420 millones, han salido al mercado en forma de letras a nueve meses, con unos intereses negativos del 0,344%, frente al -0,307% de la puja anterior, que se celebró el pasado 16 de octubre.
El resto, 537 millones de euros, se ha emitido en letras a tres meses, con un rendimiento marginal también negativo, del -0,595%, frente al -0,636% de la subasta anterior.
En opinión del analista de XTB Javier Urones, con ambos movimientos, el Tesoro sigue manteniendo los intereses negativos en los plazos inferiores a dos años y consigue incrementar ese "coste" para el inversor en la referencia a nueve meses.
Tras haber colocado ya a estas alturas de año la mayor parte del volumen previsto, añade, se puede concluir que el Tesoro de nuevo "va camino de reducir el coste medio de la deuda viva y aprovechar al máximo las ventajas del programa de compras del Banco Central Europeo (BCE)".
De momento, en la subasta de hoy los inversores han solicitado en total 8.014 millones de euros entre ambas denominaciones, aproximadamente 2,7 veces más que los 2.957 millones finalmente adjudicados, por debajo del máximo de hasta 3.500 millones que se había fijado el Tesoro como objetivo.
Con la prima de riesgo en 129 puntos básicos, uno más que en la apertura, el mercado reacciona con cautela al principio de acuerdo sobre el "brexit" alcanzado estos días, que el presidente español, Pedro Sánchez, ha anunciado que rechazará si no introduce aclaraciones sobre el estatus de Gibraltar.
España celebrará el jueves otra subasta, esta vez de títulos a más largo plazo, en la que tiene previsto captar hasta 3.500 millones de euros en una vieja referencia de bonos a 3 años y 11 meses y en obligaciones a 10 y 15 años.