Este excedente en el sistema eléctrico se debió, fundamentalmente, a unos costes inferiores a los inicialmente previstos de la retribución de la distribución, de la retribución específica de instalaciones de producción renovable y de la retribución adicional de los sistemas no peninsulares, parcialmente compensados por unos ingresos externos a peajes inferiores a los inicialmente previstos.
El superávit es superior en 141 millones al previsto en la orden ETU/1976/2016 (9,43 millones de euros) y en 146,6 millones de euros al previsto en la orden ETU/1282/2017 (3,83 millones de euros).
CUARTO AÑO CONSECUTIVO DE SUPERÁVIT
De esta manera, el sistema eléctrico acumula su cuarto año consecutivo en superávit, desde 2014, en que sumó un excedente de 550,3 millones de euros.
En el año 2015, el superávit del sistema eléctrico alcanzó los 469,3 millones de euros, mientras que en 2016 ascendió a 421,45 millones de euros. No obstante, la deuda del sistema eléctrico pendiente de pago asciende a más de 20.000 millones de euros.
De esta manera, acumulaba más de 1.440 millones de euros de superávit en esos tres ejercicios, aunque el año pasado el Gobierno ya acordó devolver a las comercializadoras eléctricas las cantidades abonadas por el bono social en los ejercicios 2015 y 2016, importe que ascendía a unos 500 millones de euros, con cargo a los superávits del sistema eléctrico.
Esa no es la única vez que se ha recurrido a este excedente de los últimos años, ya que esta misma semana el Ministerio para la Transición Ecológica decidió traspasar 60 millones de euros procedentes del superávit eléctrico al presupuesto del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) para instrumentar un sistema de ayudas a la instalación de plantas de generación renovable en territorios extrapeninsulares.
Además, también el actual Gobierno, en el real decreto de medidas urgentes aprobado en octubre para combatir la subida del precio de la luz, aprobó, para mayor refuerzo de la sostenibilidad financiera del sistema eléctrico, introducir la posibilidad de que el superávit acumulado de ingresos del sector eléctrico pueda ser aplicado a los desajustes de ingresos y gastos que se pudieran producir en los ejercicios 2018 y 2019.
SE INCLUYEN 60 MILLONES POR CASTOR
En el caso del sector gasista, el déficit en 2017 fue de 24,78 millones de euros, lo que supuso una desviación negativa del 0,91% sobre la retribución acreditada del sistema para el ejercicio.
En esta liquidación definitiva se incluyen los pagos con origen en la compensación por la extinción de la concesión del almacenamiento subterráneo Castor, realizados con anterioridad a la sentencia del Tribunal Constitucional de diciembre de 2017 que anulaba estos pagos.
En la orden ETU/1977/2016, de 23 de diciembre, se reconoció para el ejercicio 2017, un importe de 80,664 millones de euros a los titulares del derecho de cobro -Banco Santander, Bankia y CaixaBank- con cargo al sistema gasista a realizar en doce pagos.
Así, en la liquidación definitiva del ejercicio 2017 están incluidos los nueve pagos ya realizados hasta la publicación de la sentencia del Constitucional, que ascienden a un total de 60,49 millones de euros.