Wall Street se apunta al rebote tras la dura sesión del jueves en la que el Dow Jones se dejó más de 660 puntos lastrado por el desplome en la cotización de Apple. El indicador logra este viernes avances de un 3,3% para recuperar nada menos que 746 puntos y los 23.432 enteros al cierre de la sesión. Mientras, el S&P 500 gana un 3,4% en 2.531 puntos. Más fuerza aún ha logrado el tecnológico Nasdaq para su rebote: alzas del 4,3% sobre el toque de campana hasta los 6.738,9 puntos después de haber perdido más de un 3% ayer jueves.
La alegría compradora se ha acelerado tras las palabras de Jerome Powell durante un encuentro ante la American Economic Association, en el que también han participado sus antecesores Janet Yellen y Ben Bernanke. El presidente de la Reserva Federal (Fed) ha asegurado que el organismo "escucha atentamente" los mensajes del mercado, por lo que se mostrarán pacientes y sensibles a los riesgos bajistas para la economía.
Los analistas de Link Securities indican que, con los inversores descontando una fuerte desaceleración del crecimiento económico, serán los datos macroeconómicos los que se vayan publicando los que determinen, en función de su mayor o menor bondad, la dirección de los mercados.
En este sentido, los inversores han conocido ya los datos definitivos de empleo del mes de diciembre. Las nóminas no agrícolas se situaron en 312.000 frente a las estimaciones que apuntaban a que se crearían 177.000 puestos de trabajo. Por su parte, la tasa de desempleo se ha elevado desde el 3,7% anterior hasta el 3,9%. La media de ingresos por horas subió un 0,1% hasta situarse en el 3,2%.
Mientras Wall Street se repone de su peor inicio de año desde el 2000, los inversores piensan ya en las próximas citas clave que definirán el devenir de los mercados. La más inmediata, la reunión que los próximos 7 y 8 de enero mantendrán EEUU y China en Pekín para avanzar en un acuerdo comercial.
En el apartado empresarial, todas las miradas se dirigen hacia Apple, que el jueves se desplomó cerca de un 10% tras revisar a la baja su previsión de ingresos. Una noticia que los inversores acogieron como un nuevo síntoma de desaceleración global. Los títulos de la compañía, que ha caído al cuarto puesto del ranking de las cotizadas más valiosas del mundo, rebotan un 4,27% hasta los 148,26 dólares, incluso a pesar de los recortes de consejo inversor que la de Cupertino ha sufrido.
Otras tecnológicas se suman a los avances. Alphabet, la matriz de Google, ha subido un 5,4% hasta los 1.070,7 dólares por acción, mientras que Amazon se ha disparado un 5% hasta alcanzar los 1.575,4 dólares.
En el lado de las ganancias también se han colocado las acciones de General Motors. Alzas del 3,4% a pesar de que los analistas de UBS han recortado el precio objetivo de la compañía de 53 dólaresa 43 dólares por acción, aún holgadamente por encima de los 33 dólares en los que cotiza actualmente.
Por el mercado secundario de renta fija, los bonos del Tesoro estadounidense a diez años se han apuntado una subida de 10,4 puntos básicos en rentabilidad, hasta el 2,661%. Es la mayor subida de estos papeles desde noviembre de 2016. A pesar de este enérgico rebote, el rendimiento de estos bonos acumula una caída de 7,9 puntos básicos en la semana.