El sector bancario cerró 2018 con un incremento de beneficio del 23% hasta los 16.676 millones de euros. Una cifra que no ha convencido a los analistas ante la clara debilidad en el margen de intereses y la rentabilidad de una industria golpeada por el entorno de tipos de interés en mínimos.
Ante este escenario, los analistas ya han sacado la tijera para valorar unas cuentas recién salidas del horno. Los valores peor parados por las primeras firmas de inversión son, de nuevo, CaixaBank y Banco Sabadell.
Especialmente duro es el castigo para CaixaBank. El presidente de la entidad, Jordi Gual, ya anticipó en la presentación de resultados del pasado viernes un año duro para el sector. Pero seguro que no se imaginaba el brusco desplome de más del 7% que el valor sufrió ese día en bolsa. Una caída que no ha encontrado suelo este lunes, con pérdidas del 4,94% hasta los 2,92 euros por acción. Es la primera vez desde diciembre de 2016 que la entidad pierde la cota de los 3 euros.
Las revisiones a la baja por parte de los analistas no se han hecho esperar y, según el consenso de Thomson Reuters, su precio objetivo medio ha bajado un 3,5%, de 4,22 euros a 4,02 euros por acción, en solo un día. Desde inicios de año la valoración del banco se ha desplomado un 7,3%, desde los 4,39 euros que los expertos estimaban para la entidad a principios de enero.
Este lunes, la ola de recortes sobre el valor la encabeza Kepler Cheuvreux, que ha bajado el precio objetivo de CaixaBank de 4 euros a 2,9 euros por acción. Los analistas de Mediobanca también lo han reducido de 4 a 3,7 euros por título, mientras que Alantra otorga ahora un valor de 3,5 euros a la entidad, desde los 3,75 euros que mantenía hasta ahora. Por su parte, JP Morgan también ha rebajado el precio objetivo del banco de 4,7 euros a 4,1 euros por acción.
Banco Sabadell tampoco está pasando por un buen momento. El desplome de su beneficio anual por el impacto de su filial británica TSB ha provocado que el banco sea ya el peor valor del Ibex 35 en lo que va de año, cotizando en mínimos históricos de 0,86 euros tras el desplome de casi el 40% registrado en todo el 2018.
El consenso de analistas ha rebajado la valoración sobre el valor de 1,43 euros a 1,41 euros por título desde el viernes que presentó sus resultados. El recorte es más contundente si se compara con los 1,53 euros que los expertos otorgaban a la entidad a principios de año. Entre las firmas internacionales más rápidas en reaccionar destaca Deutsche Bank, que ha recortado su precio objetivo sobre Sabadell a 1,15 euros por acción. Por su parte, la firma suiza UBS ha rebajado su valoración hasta los 1,25 euros.
Los títulos del banco suman un 4,8% de caídas al desplome del 9% sufrido el viernes. Esta ha sido, de hecho, su sexta sesión de pérdidas consecutiva en las que la entidad se ha dejado un 20% desde los 1,08 en los que cerró el 25 de enero.