El Ibex 35 ha abrochado este viernes su séptima semana de ganancias de las nueve celebradas hasta la fecha en 2019. Casi nada. Eso sí, el cierre de la semana ha dejado un sabor amargo. En una sesión en la que ha llegado a subir cerca de un 1% y a tocar los 9.361 puntos, ha terminado bajando la persiana con una caída del 0,1%, hasta los 9.267,7 puntos. Al final, un avance semanal del 0,7% que conduce a una revalorización del 8,5% en 2019.
La flojera vista en la recta final de la sesión ha tenido como protagonistas a varios de los principales valores del índice. BBVA se ha dejado un 1,7%; Telefónica, un 1,4%; Santander, un 1%; e Iberdrola, un 0,8%.
Si el reflejo de estas caídas no ha sido mayor en el saldo diario final del Ibex se ha debido a que la resaca de los resultados presentados este jueves ha sido pronunciadamente alcista en un puñado de valores. Ha sido el caso de Técnicas Reunidas, el mejor valor del día con una revalorización del 6,9%. Lo mismo que Cellnex, que ha sumado un 6,3%, o Viscofan, cuyas acciones se han disparado un 5,5% al cierre de la sesión.
Ferrovial y Acciona, que publicaron sus cifras al cierre de la sesión del jueves, también se han apuntado al lado amable de la tabla de revalorizaciones del 2,5% y el 4,9%, respectivamente. E Indra ha sumado un 3,7% después de que la compañía tecnológica, que también presentó sus cuentas este jueves al cierre, batiera las previsiones tanto en ingresos como en contratación y ebitda, con lo que ha confirmado objetivos para este año.
Entre los descensos, con una caída del 1,4%, se coloca Red Eléctrica (REE). La compañía conductora de electricidad encaja así un recorte de consejo y precio objetivo de parte de los analistas de RBC. Los expertos de esta casa aconsejan ahora infraponderar y fijan techo para sus acciones en 17,5 euros, por debajo de su actual cotización en bolsa.
La agenda macroeconómica del día ha tenido sus referencias más destacadas en los índices PMI de actividad en el sector manufacturero. En el caso del español, malas noticias: contracción por primera vez desde 2013 al haber caído por debajo de los 50 puntos. Además, el foco va para las ventas minoristas de enero en Alemania, que con una subida del 3,3% han supuesto un balón de oxígeno para la locomotora de Europa en un momento en el que otras cifras apuntan hacia una mayor debilidad de su economía.
En el ánimo de los inversores han pesado también las noticias que llegan sobre las negociaciones en materia comercial entre China y EEUU. Los analistas de Link Securities señalan que el diálogo “estaría avanzando en la redacción de un acuerdo -se habla incluso de 150 páginas-, que sería firmado por los presidentes Donald Trump y Xi Jinping a mediados de marzo”. Estas especulaciones son las que han permitido el cierre alcista de las bolsas asiáticas a las que las europeas toman el relevo.
La deuda pública también ha sido protagonista esta semana. La prima de riesgo española, que mide el interés adicional que el mercado exige al bono español a 10 años sobre el alemán, ha llegado a situarse bajo los 100 puntos básicos, algo que no ocurría desde septiembre. Termina la semana en los 101 puntos, con la rentabilidad del bono español en el 1,20% y la del alemán, en el 0,19%.
En el mercado de divisas, el euro se aprecia un 0,2% y se acerca a los 1,14 dólares, en tanto que el barril Brent, de referencia en Europa sube hasta los 66 dólares.