Una de cal y otra de arena. Así se las da el Banco Central Europeo (BCE) a las bolsas de la región. El anuncio de que los tipos se mantendrán en mínimos históricos al menos hasta finales de 2019 daba impulso a los índices de bolsa, pero la cautela mostrada después por su presidente Mario Draghi ha impuesto las ventas. El Ibex 35 ha pasado de rebasar los 9.360 puntos a perder los 9.250 de un minuto para otro. Al cierre, se ha dejado un 0,5%, hasta los 9.249,9 puntos.

La clave del vuelco, en la banca, que sufre por la debilidad de las previsiones macroeconómicas del organismo (el pronóstico para el PIB de la Eurozona ha caído del 1,7% al 1,1%) y por el retraso en la subida del precio oficial del euro. El mayor peso del sector en el Ibex 35 que en otros índices europeos impone caídas superiores al 0,5% para el selectivo español.

Banco Sabadell se ha colocado  al frente del descalabro del sector, al perder un 7,25% de cotización y descender con fuerza una vez más por debajo del euro por título. Bankia (-5,3%), CaixaBank (-3,9%), Santander (-3,5%), Bankinter (-3,1%) y BBVA (-2,9%) han copado los puestos de cola del índice, aunque al cierre de la sesión han logrado salvar sus cruces más bajistas.

Los descensos han superado el 3% también en Técnicas Reunidas (-3,6%), Cie Automotive (-3,5%) Mediaset España (-3,5%) y ArcelorMittal (-3,1%). 

Al otro extremo de la tabla de revalorizaciones, se siente la búsqueda de refugio inversor en valores defensivos, pues lideran Iberdrola (+3,5%), Endesa (+3,3%), Naturgy (+2,8%), Enagás (+2,8%) y Red Eléctrica (+2,6%) se han alineado al frente del índice. Grifols, que este jueves ha anunciado un nuevo movimiento para crecer en China, ha subido un 2,2%. 

Los demás asuntos de la agenda del día pasan a un segundo plano. Los bancos centrales se convierten en protagonistas absolutos después de que ayer miércoles el Libro Beige de la Reserva Federal (Fed) constató la ralentización económica en EEUU al inicio de año, aunque con un tono más optimista que el que ha empleado hoy Draghi.

Por el mercado secundario de renta fija, también se deja notar la última edición del 'efecto Draghi'. La rentabilidad de los bonos españoles se suaviza hasta el 1,05% frente al 0,07% que marcan los 'bunds' alemanes de referencia. Las subastas de liquidez para la banca y la permanencia de los tipos en mínimos dejan la prima de riesgo en 98 puntos.