La euforia por la inversión en marihuana que estalló el año pasado sigue lejos de esfumarse. Al contrario, la entrada de grandes inversores en varias cotizadas del sector y las primeras fusiones entre algunas de ellas han impulsado un nuevo rally para el cannabis, que, además, esta vez viene arropado por el rebote generalizado de las bolsas. Estos son los ingredientes que provocan un apetito cada vez mayor en el mercado.
A la hora de justificar las abultadas revalorizaciones que algunas compañías de cannabis se apuntan en las bolsas norteamericanas, los analistas que más de cerca siguen el sector lo tienen claro. Un punto y aparte lo ha marcado la entrada de grandes inversores institucionales a los que no les es fácilmente imputable un perfil especulativo. Tal es el caso de fondo de pensiones público sueco AP7, que tiene unos 100 millones de coronas (9,6 millones de euros al cambio) invertidos en títulos de Aurora y Canopy Growth, dos de las firmas más destacadas de esta pujante industria del cáñamo.
Si bien la cifra no es muy abultada en una cartera que aglutina más de 51.200 millones de dólares bajo gestión, la irrupción en un sector siempre polémico es significativo. Tanto que el fondo sueco ha apostado por la creación de valor a largo plazo -ese es su mandato- en unas compañías que incluso el Consejo de Ética del propio vehículo estatal recomendó evitar en su cartera de inversión.
Pero el caso del fondo encargado de las pensiones públicas de Suecia no es un hecho aislado. En los últimos meses también se han descubierto como inversores en marihuana la Comisión de Inversiones de Pensiones del Sector Público de Canadá (PSP) y el Sistema de Pensiones de Funcionarios de California (CalPERS). Este último ha declarado posiciones en Tilray, compañía a la que el vehículo canadiense suma Canopy, Aurora, Aphria y Cronos Group. Una cartera más extensa que se justifica también en el hecho de que los vecinos del norte de EEUU tienen aprobado el uso de la marihuana con fines recreativos desde octubre del año pasado.
UN RALLY AL QUE LE QUEDA POTENCIAL
La toma de posiciones relevantes por parte de estos y otros vehículos institucionales ayuda a justificar, junto con factores más de fondo como la buena evolución de sus cuentas trimestrales, que Aurora haya subido un 74% desde que empezó el año y Canopy o Cronos ronden el 50% de ganancia. Líderes indiscutibles en una Bolsa de Toronto, su mercado doméstico, en el que el índice de referencia TSX 60 sube, pero apenas un 15% desde enero.
Un factor más sostiene el apetito de los inversores por el sector: la previsión de una avalancha de fusiones. Las operaciones corporativas son habitualmente un motor al alza en las cotizaciones de una industria en particular cuando se producen de forma recurrente, y eso es lo que está ocurriendo con el cannabis. De hecho, es una estrategia muy seguida por fondos especializados y ‘hedge funds’ de cobertura, especialmente activos en estos tiempos de volatilidad en los mercados de renta variable.
Un ETF sobre marihuana se ha colado entre los cinco más alcistas de todo Wall Street, lo que ha animado el lanzamiento de nuevos productos de inversión especializados
En esta línea, solo en la última semana se han conocido dos operaciones protagonizadas por dos de los abanderados del sector. Aurora Cannabis ha alcanzado un acuerdo para la compra del 48% que aún no controlaba de Hempco Food and Fiber. Y con una jugosa prima del 14% sobre su cotización en la bolsa canadiense. Por su parte, Canopy Growth ha anunciado la compra del productor alicantino Cáñamo y Fibras Naturales (Cafina) con el objetivo de ir abriendo mercado en Europa.
A tenor de estas previsiones y la llegada de más y más inversores, no es de extrañar que un fondo cotizado (ETF) especializado en compañías de cannabis se haya hecho hueco entre los cinco que mejor han cerrado el primer trimestre en Wall Street. Se trata del Alternative Harvest, que con una revalorización del 44% se coloca en segunda posición del ranking solo por detrás de uno focalizado en acciones chinas, según datos recopilados por CNBC.
MÁS PRODUCTOS PARA UN MAYOR APETITO
La propia historia de este ETF habla del creciente vuelco de las carteras hacia el cannabis, pues hasta mediados del año pasado este fondo cotizado invertía en inmobiliarias especializadas en el mercado latinoamericano. Tras su reconversión, ha sido uno de los que más ha apostado por la generalización del uso y comercialización del cáñamo, ya que entre sus postulados está el que las compañías tabaqueras pronto se lancen a comercializar productos que incluyan hojas o extracto de la planta originaria del Himalaya.
Al calor de este rally, los productos de inversión sobre esta industria siguen proliferando con el gancho de ofrecer exposición a carteras que no quieran jugársela toda a una única carta. Así, esta semana la gestora Evolve ha completado el registro del US Marijuana ETF, que está focalizado en las compañías del sector radicadas en EEUU y cuyo inicio de contratación se ha producido este miércoles 17 de abril en la plataforma canadiense NEO Exchange. Igualmente, el bróker de derivados Plus 500 ha lanzado la posibilidad de invertir mediante contratos por diferencia (CFD) en un Índice de Cannabis que da cabida a de las 20 cotizadas líderes del sector.
La fiebre sigue y los analistas le pronostican una larga vida. Tal es así que a la pujante Aurora le otorgan aún un potencial alcista de consenso del 17% y ocho de los once expertos que vigilan la evolución de su cotización y negocio recomiendan comprar. Con pronósticos así no es de extrañar que sean cada vez más los pequeños y grandes inversores que ‘se enganchan’ a aderezar sus carteras con algo de marihuana.