¿Efecto Salvini? La Bolsa de Milán se convierte en farolillo rojo de Europa
- El índice de referencia milanés ha sido el único de los grandes del continente en rojo
- Ha sido la respuesta de los inversores a la aplastante victoria del ultraderechista y euroescéptico
La bolsa italiana se ha descolgado de las subidas en Europa en este lunes en el que las plazas del Viejo Continente han puesto en precio los resultados de los comicios al Parlamento Europeo. En general los inversores festejan el hecho de que la extrema derecha y los euroescépticos no puedan bloquear los acuerdos de la Eurocámara. Sin embargo, el Ftse MIB milanés se ha dejado a contracorriente un 0,06% tras conocerse que el euroescéptico Liga se ha alzado con la victoria.
La ultraderechista Liga ha obtenido más de un tercio de los votos, el 34,3%, según los resultados definitivos, que han sido de los más tardíos en conocerse ya que los colegios electorales no cierran hasta las 23:00 horas en el país transalpino. Además, en Italia se confirmó el avance del Partido Demócrata de centroizquierda, que se situó en el segundo lugar con el 22,7% de los votos. Un paño caliente para el golpe anterior, según observadores políticos.
En el resto de plazas, se ha puesto en valor la victoria del Partido Popular Europeo con 179 diputados, frente a los 221 que tiene ahora, con los socialdemocrátas en segunda posición (con 150 diputados frente a los 191 de ahora) y los liberales en tercer puesto, que han pasado de 67 a 107 parlamentarios, está gustando a los mercados.
La consecuencia de este escrutinio ha sido que el resto de grandes bolsas europeas también ha cotizado con alzas. El índice paneuropeo EuroStoxx 50 ha ganado un 0,4%, mientras que las bolsas francesa y alemana se han apuntado subidas del 0,37% para el CAC 40 y del 0,5% para el DAX.
París fue otra de las sorpresas electorales, lo que explica su comportamiento más moderado .El partido de la ultraderechista Marine Le Pen derrotó en las europeas a la lista del presidente francés, Emmanuel Macron, por apenas nueve décimas, una victoria inferior a la que preveían las encuestas y que amortigua algo el golpe para el actual mandatario, según los resultados definitivos del escrutinio.