Iberdrola ha conseguido el adelantamiento al Santander. Aunque no ha logrado retenerlo. Pasito a pasito, a media sesión de este martes, la eléctrica ha conseguido convertirse en la cotizada con más peso del Ibex 35. Un hito para la presidida por Sánchez Galán que, sin embargo, no ha podido afianzar al cierre de la sesión. No obstante, en el punto máximo de divergencia entre ambas compañías ha llegado a marcar 808,45 millones de euros de ventaja frente al banco. Así, la eléctrica ha probado ya qué es eso de ser la compañía más valiosa de toda la bolsa española.
Los 9,01 euros por acción a los que Iberdrola ha accedido en máximos intradía suponían una capitalización de 57.360,44 millones de euros para la eléctrica, según los datos de acciones emitidas recogidos por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y los precios de sesión señalados por Infobolsa. El Santander, que en sentido opuesto ha cotizado bajista durante buena parte de la sesión, ha visto mermar su valor bursátil hasta los 56.551,99 millones de euros, una cota a la que ha llegado al marcarse un mínimo intradía de 3,48 euros por título.
El adelantamiento de Iberdrola se veía venir desde hace semanas, tal y como adelantó este portal, pues mientras que en este tiempo los inversores han buscado refugio en 'utilities' como Iberdrola, no han dejado de castigar a la banca. El pasado viernes, la distancia en ponderación ya solo era de 60 puntos básicos, mientras que al cierre de este lunes la supremacía del Santander tan solo se apoyaba en 23 puntos básicos. Menos de la mitad que en la jornada precedente. Un día después más, la brecha ha llegado a inclinarse por la eléctrica.
No obstante, la hazaña no ha sido completa, pues al cierre de sesión ni Iberdrola ha conseguido aguantar en máximos ni el Santander se ha quedado condenado en sus mínimos de la jornada. El último cambio ha sido de 8,932 euros para cada acción de la eléctrica frente a los 3,591 euros a los que se han pagado las últimas acciones del banco en ser negociadas. Así, el presidido por Ana Botín ha aguantado una capitalización de 58.305,54 millones de euros frente a los 56.826,03 en los que ha despedido el martes la energética que comanda Ignacio Galán. Todavía a favor del financiero, 1.479,5 millones gracias a la remontada de última hora de un sector que ha celebrado la reanudación de la negociación comercial entre EEUU y China.
Tras todo lo anterior, hay que señalar que Iberdrola no es el valor de mayor capitalización de la bolsa española. Este honor aún se lo reserva Inditex. Y a una más que prudente distancia, pues en mínimos intradía de esta sesión no ha bajado de los 80.721,3 millones de euros. Esta disparidad entre capitalización y peso en el Ibex 35 se debe a que en la composición del índice rey de la bolsa española cada valor tiene una ponderación ajustada al capital que en cada caso se negocia libremente en bolsa, el conocido como ‘free-float’.
En atención a este criterio, tanto Iberdrola como el Santander ponderan por el 100% de su capital, mientras que Inditex lo hace solo por un 60% de sus acciones. Así, la textil está relegada (por ahora) al tercer puesto del ranking en peso dentro del Ibex 35, pero el duelo por el liderazgo de la tabla entre la eléctrica y el banco se puede medir directamente en términos de capitalización. Tanto por capitalización como por peso en el selectivo español, Telefónica es la cuarta de la tabla, con una valoración de mercado que ronda los 32.480 millones de euros.
LA CLAVE DE LA PONDERACIÓN
Más allá de lo que una compañía capitaliza en bolsa, la clave de su verdadero valor está en el peso que tiene en los índices de referencia del parqué en el que cotiza. En este sentido, una mayor ponderación supone más impacto sobre el devenir de la cotización del selectivo de turno y la necesidad de que tenga más peso en las carteras que pretenden segir su evolución. Es así que los pesos pesados del Ibex 35, los llamados 'blue chips' son imprescindibles de los fondos cotizados (ETF, por sus siglas en inglés) y otros productos que buscan reproducir la trayectoria del mismo.
Este factor es especialmente significativo para los ETF y vehículos de réplica física, es decir, para aquellos que en su cesta de valores incluyen todos los que forman parte del índice que siguen y en pesos idénticos o muy similares. Del mismo modo ocurre en aquellos de muestreo, que lo que hacen es concentrar sus posiciones en los valores más representantivos del índice en cuestión sin entrar en aquellos con ponderaciones más residuales. En el caso español, los miembros del Ibex menos valiosos para su cálculo son Ence y e Indra.
Los analistas se han convertido en el principal apoyo de Iberdrola en la lucha por conseguir esta gesta. Eso sí, junto con la entrada de dinero inversor a la búsqueda de refugio desde valores de componente más cíclico. Al 30% de revalorización en lo que va de año, los expertos añaden más potencial a medio plazo y, desde que la eléctrica presentó sus cuentas semestrales, se han volcado con ella.