Agosto ya es historia en los mercados financieros. Y fiel a su costumbre, su paso ha dejado considerables dosis de nerviosismo y volatilidad en los distintos activos. La prolífica cuenta de Twitter de Donald Trump, la guerra comercial entre China y EEUU, la depreciación del yuan chino, la crisis política de Italia, la inestabilidad política y financiera de Argentina o el Brexit duro perseguido por Boris Johnson han marcado un mes que comenzó con la resaca que dejó la Reserva Federal (Fed), que el 31 de julio ejecutó la primera bajada de los tipos de interés en EEUU desde 2008.
Por si has estado de vacaciones y has preferido olvidarte de los mercados en las últimas semanas, 11 referencias te ayudarán a seguir lo ocurrido en el mes más veraniego de todos.
1. Ibex 35. Agosto suele ser sinónimo de caídas en el índice español. Y 2019 no ha supuesto ninguna excepción. El Ibex despacha agosto con un descenso del 1,8% que le deja en los 8.800 puntos. Y podía haber sido bastante peor, porque durante la sesión del 15 de agosto llegó a caer hasta los 8.409 puntos, por debajo de los 8.539 puntos a los que finalizó 2018. El rebote de la última semana, con cinco subidas consecutivas, le permite mantenerse en positivo, aunque apenas sube ya un 3,2% en 2019.
2. Iberdrola. Llevaba tiempo mostrando sus intenciones, pero ha sido en agosto cuando las ha culminado. El buen momento bursátil de la eléctrica, que sube un 40% en el año, y el malo de Banco Santander, que baja un 10%, se han combinado para que la primera ya valga en bolsa más que el segundo. La capitalización de Iberdrola alcanza los 60.000 millones y la del banco cántabro se sitúa en 56.500 millones, algo que, de manera automática, convierte a la eléctrica en el valor con más peso en el Ibex, puesto que Inditex, que es la compañía española con mayor capitalización, con 85.000 millones, solo pondera en el indice por un 60% de ese importe.
"El oro brilla, con sus precios más altos desde 2013, en un mes marcado por la depreciación del yuan chino y el descenso del rendimiento de los bonos para consagrar esta 'era de los tipos negativos'"
3. Yuan chino. La divisa del gigante asiático ha tenido un claro protagonismo en agosto en medio del fuego cruzado de la guerra comercial entre EEUU y China. Como ya ocurrió en 2015, cuando la devaluación del yuan agitó los mercados en agosto, este 5 de agosto la moneda china acaparó las miradas puesto que registró una caída del 1,6% contra el dólar estadounidense, que superó la barrera de los 7 yuanes por primera vez desde 2008. Termina agosto claramente por encima de ella, en los 7,15 yuanes, después de que el yuan haya acumulado una depreciación próxima al 4% en el conjunto del mes. Su evolución, sin duda, será clave en la evolución de las tensiones entre Washington y Pekín.
4. Peso argentino. Argentina vuelve a estar contra las cuerdas financieras. El presidente Mauricio Macri ya ha reconocido que el país no puede hacer frente a los vencimientos de la deuda en el corto plazo y busca alternativas, mientras negocia y renegocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI), para evitar una situación aún peor, en un horizonte en el que le aguardan unas elecciones el 27 de octubre en las que con toda probabilidad será derrotado. Esta incertidumbre se ha dejado notar con dureza en el peso argentino, que en agosto se ha depreciado cerca de un 25% contra el dólar estadounidense, que ha llegado a cambiarse por encima de los 60 pesos por primera vez.
5. Oro. El metal precioso se las prometía felices en 2019. Pero posiblemente no tanto. La onza de oro ha superado los 1.500 dólares en agosto, algo que no se veía desde 2013. En el conjunto del mes se ha revalorizado un 7% y en lo que va de año su precio se dispara un 20%. Y los analistas consideran que, como activo refugio en medio de la importante incertidumbre actual, todavía tiene margen para subir más.
6. 'Bund' alemán. La 'era de los tipos negativos' ha seguido engordando en agosto. El volumen total de bonos con rendimientos inferiores al 0% supera los 16 billones de dólares, según los datos recogidos por Bloomberg. El gran reflejo de esta histórica realidad se observa en el 'bund'. Descontando los nuevos estímulos que el Banco Central Europeo (BCE) anunciará con toda seguridad en septiembre, la rentabilidad del bono alemán a 10 años acaba agosto en el -0,70%.
7. Bono español. La onda expansiva de los tipos negativos ya está llamando a la puerta del bono español a 10 años. Empezaba agosto cerca del 0,3% y lo finaliza en el 0,11%, aunque ha llegado a estar en el 0,03%. Parece cuestión de tiempo que se sitúe también por debajo del 0% por primera vez en la historia.
8. Bono estadounidense a 30 años. La deuda estadounidense también ha visto cómo las expectativas de nuevos recortes de los tipos por parte de la Fed han alimentado las compras de bonos con el consiguiente descenso de los rendimientos, que bajan cuando el precio de los títulos sube. Una de las consecuencias más relevantes ha consistido en la inversión de la curv0a de rentabilidades, con los bonos a dos años ofreciendo un interés (1,55%) superior al de los bonos a 10 años (1,53%). Otro efecto importante se ha visto en los bonos a 30 años, cuyo rendimiento ha marcado un mínimo histórico en el 1,91%.
9. Bitcóin. El rey de las criptodivisas cierra por debajo de los 10.000 dólares tras registrar una caída mensual del 5% que, en su búsqueda por convertirse en un activo refugio, contrasta con la importante subida mensual del oro. En lo que va de año, eso sí, y tras su fulgurante segundo trimestre, acumula una revalorización del 150%.
10. Petróleo. Las incertidumbres económicas, comerciales y geopolíticas han dejado una clara huella bajista en el petróleo durante el mes de agosto. El barril Brent, de referencia en Europa, ha caído más de un 7%, hasta los 60 dólares.
11. Euríbor a 12 meses. La referencia hipotecaria ha roto todos sus registros por segundo mes consecutivo. Si en julio su media mensual marcó un nuevo mínimo histórico al situarse en el -0,283%, en agosto ha ido aún más allá para descender hasta el -0,356%. El índice hipotecario descuenta así las nuevas medidas expansivas del BCE, entre las que se espera una nueva rebaja de los tipos de depósito, situados ahora en el -0,40%.