Las dudas han regresado a la Bolsa de Nueva York. A pesar de la estabilidad en la que han entrado algunos de los focos de tensión política que en las últimas sesiones habían atacado a lo mercados, el que el horizonte del Brexit sigue sin despejarse del todo y la incertidumbre sobre los próximos movimientos de los bancos centrales se ha traducido en un cierre mixto para los principales índices de Wall Street.
El Dow Jones ha esquivado las caídas y ha conseguido apuntarse un 0,14% hasta los 26.835,5 puntos. El tecnológico Nasdaq Compositeha logrado salvar los 8.000 puntos a pesar de haber caído un 0,19% hasta los 8.087,4 puntos. Mientras, el S&P 500 que lideraba los avances en la apertura ha cerrado con un retroceso del 0,01% hasta los 2.978,4 puntos.
Sin referencias macroeconómicas de calado, los inversores han permanecido atentos a cualquier señal sobre los próximos movimientos de los bancos centrales, especialmente del BCE de la Eurozona y de la Reserva Federal de EEUU (Fed). Las dudas sobre la capacidad de las instituciones para desplegar nuevos estímulos ha impuesto un alto en el camino de regreso hacia la renta variable y los inversores han preferido asegurar ganancias en muchos casos.
No obstante, la curva de tipos se estabiliza, con el bono a dos años en el 1,59% y el de vencimiento a una década con tipos del 1,63%.
El foco de la sesión neoyorquina en el terreno corporativo se ha colocado sobre la ‘teleco’ AT&T después de conocerse un plan del fondo activista Elliott Management para disparar sus acciones en torno a un 65%. Sus gestores, que se han hecho con un 1,2% de la cotizada, consideran que si se despliegan sus propuestas la compañía podría alcanzar los 60 dólares por acción para 2021. Este lunes, con un rebote del 1,5%, se han aproximado a los 38 ‘billetes verdes’.
También se avecinan cambios en Alcoa. La metalúrgica ha anunciado que llevará a cabo una reestructuración de su organigrama para evitar un sobredimensionamiento de cargos directivos y mejorar su estructura productiva. A falta de mayor concreción, la compañía ha adelantado que los gastos de este vuelco se imputarán al balance del tercer trimestre. Sus acciones han encajado la noticia con alzas del 6,2%.
La cadena de restaurantes Chipotle Mexican Grill se ha apuntado máximos históricos al conseguir continuidad alcista para su gráfica, un 0,4% al alza hasta los 839,65 dólares, con una mejora de consejo de los analistas de Wedbush. La firma de inversión se ha convertido en la más optimista para con el grupo de hostelería, al que concede un potencial alcista del 17%, hasta los 980 dólares por acción, con recomendación de compra. Hasta ahora, el techo lo fijaba en 780 dólares.
Los preparativos para el debut bursátil de We Co, la matriz del grupo de espacios de ‘coworking’ WeWork, también se colocan en la picota del mercado. La prensa especializada señala que se estaría planteando rebajar su valoración inicial para el estreno en Wall Street por debajo de los 20.000 millones de dólares, una marca que se quedaría muy lejos ya de los 47.000 millones a los que se valoró la compañía en su última ronda privada de financiación.
Muchas miradas se han dirigido también hacia Apple. La gigante tecnológica ha subido un 0,43% en la víspera de la presentación de su nuevo iPhone 11, cita para la que ha convocado a especialistas del sector en sus cuarteles generales de Cupertino este martes 10 de septiembre.
Dentro del mismo sector, la recta final de la sesión ha encontrado protagonista en Google. Medio centenar de fiscales de distintos estados y territorios de EEUU han iniciado una investigación contra la compañía por supuestas prácticas monopolísticas a través de su conocido buscador. Sin embargo, los inversores ya habían descontado este factor y al cierre apenas si ha cedido un 0,09% al cierre.