La cautela que mantenía plano al Ibex 35 y sus vecinos europeos durante buena parte de la sesión se ha tornado en ánimo comprador y avances en la recta final de la sesión. El índice madrileño ha despedido el jueves con ganancias del 0,49% hasta los 9.129,7 puntos, de manera que ha recuperado la cota del 9.100 de la que ayer no tenía más remedio que despedirse. A esta remontada ha contribuido especialmente el sector eléctrico, con Endesa a la cabeza.
A esta orilla del Atlántico, la principal referencia macroeconómica ha llegado desde Alemania. Y esta vez ha dado un respiro a los inversores. El índice de confianza del consumidor GfK ha subido hasta los 9,9 puntos, dos décimas por encima de su anterior lectura y de la cota que aguardaba el consenso de economistas. Sin sorpresas en el PIB de EEUU, los compradores se han impuesto en las bolsas europeas.
El podio alcista del Ibex 35 lo han ocupado Enagás (+2,1%), Merlin Properties (+2,1%) y Endesa (+2%), siendo la última de las tres la que más pondera en la cesta de valores del Ibex 35. La también energética Naturgy se ha hecho con ganancias del 1,5%.
La socimi, medalla de plata en la sesión de este jueves, ha sido protagonista porque BBVA estaría calibrando la posibilidad de traspasarle la Operación Chamartín (ahora conocida como Madrid Nuevo Norte). El banco ha cerrado sesión con avances del 0,4%, un tono que no ha sido uniforme en el sector, pues Santander ha caído un 0,15% al cierre, como ejemplo.
Al otro extremo de la tabla de revalorizaciones, ya desde primera hora se colocaba como farolillo rojo IAG. La aerolínea ha retrocedido un 4,2% hasta los 5,2 euros por acción una vez que ha revisado a la baja sus previsiones para el año en 215 millones hasta los 3.485 millones y cita el impacto de la huelga de pilotos de British Airways y la evolución de las reservas de su negocio 'low cost'.
Del rojo más oscuro de la jornada se han teñido también ArcelorMittal (-3,6%) y Meliá Hotels (-2,4%), que respectivamente siguen pendientes de las novedades de la guerra comercial y de las consecuencias de la quiebra del gigante turístico británico Thomas Cook.
Por el mercado secundario de renta fija, la prima de riesgo española asciende hasta los 74 puntos básicos a consecuencia del repunte de la rentabilidad del bono nacional hasta el 0,15%. Mientras tanto, el 'bund' alemán a diez años aguanta en tipos negativos del -0,58%.