Bankia ha vuelto a colocarse en el vagón de cola del Ibex 35 en la que ha sido este martes su segunda jornada consecutiva de números rojos después de que ayer presentase sus resultados hasta septiembre.
Las acciones de Bankia han cerrado la sesión con caídas del 3,6% hasta los 1,70 euros. Los inversores siguen impulsando las ventas en el banco rescatado, que ayer ya cerró con una caída de un 1,80%.
El pesimismo desatado por los resultados trimestrales presentados ayer se reafirma hoy con la decisión de Credit Suisse de recortar el precio objetivo de Bankia desde 2,1 euros a 1,9 euros, no obstante por encima de su actual cotización.
Bankia alcanzó un beneficio neto atribuido en los primeros nueve meses del año de 575 millones de euros, un descenso del 22,6% respecto al mismo periodo de 2018 que el banco rescatado atribuye al menor resultado en la venta de las carteras de renta fija (ROF) y al repunte de las provisiones asociadas a la aceleración del ritmo en la reducción de dudosos.
Pese a la caída de los ingresos, el banco mantiene el compromiso de distribuir el próximo año el exceso de capital de 2.500 millones de euros entre los accionistas, si bien aclaró que todavía no ha decidido si se realizará mediante el pago de un dividendo o mediante un programa de recompra de acciones. Por el momento, Bankia ha generado 1.280 millones de exceso de capital, un 51,2% del objetivo.