El día ha llegado. Wall Street recibe al alza y con nuevos máximos históricos el esperado acuerdo comercial Fase Uno entre EEUU y China. Los débiles resultados anuales de algunos gigantes financieros pasan a un segundo plano ante la sintonía escenificada en la rúbrica entre el 'número dos' de Pekín y el presidente Donald Trump, que ha aprovechado para reclamar más bajadas de tipos de interés a la Reserva Federal (Fed).
A pesar del trago amargo de algunas cifras en los balances de grandes compañías como Goldman Sachs y Bank of America, el Dow Jones consigue sumar un 0,31% a su gráfica y da la bienvenida al pacto comercial en los 29.030 puntos, lo que supone un nuevo récord para el índice industrial. El Nasdaq sube un más suave 0,08% hasta los 9.258,7 puntos. El agregado S&P 500 también asciende a un nuevo récord en los 3.289,3 puntos al subir un 0,19%.
El impulso alcista ha llegado, además de las expectativas generadas en torno al pacto entre China y EEUU, del terreno macroeconómico, pues el índice manufacturero Empire State de enero ha alcanzado los 4,8 puntos, casi uno y medio por encima de su lectura de diciembre y de las previsiones que manejaban los economistas para este enero. Un síntoma más de la solvencia económica de la primera potencia mundial, según los analistas.
Trump y el vice primer ministro chino, Liu He, han anunciado que en breve se procederá a establecer la mesa de diálogo para la Fase Dos del acuerdo comercial, en la que previsiblemente se incorporará la recíproca retirada de aranceles. De momento, lo poco que se ha conocido del pacto de casi 90 páginas que según el presidente de EEUU sienta las bases para un "comercio justo y recíproco" entre ambos países es que China se ha comprometido a incrementar sus importaciones de bienes estadounidenses en más de 200.000 millones de dólares.
Por si fuera poco, el empresario estadounidense metido a político ha anunciado que desvelará los detalles de una segunda reforma tributaria a finales de año, como parte de su campaña a la reelección. "Estamos a muchos meses de distancia, saldrá algo más tarde durante la campaña", ha indicado Larry Kudlow, el asesor económico de Trump en declaraciones a la cadena CNBC.
Mucho menos amables han sido las cuentas de varias grandes corporaciones. Goldman Sachs, que en algunos cruces ha llegado a ceder un 2%, ha cerrado un 0,13% a la baja después de haber publicado un beneficio anual de 7.897 millones de dólares, o 4,69 dólares por acción, lo que se queda un 20% por debajo de los registros del año pasado y también de las estimaciones de los analistas, que aguardaban 5,47 dólares por acción. Un desvío que el banco ha atribuido a costes “significativamente más altos” por provisiones procedimientos regulatorios y judiciales.
El castigo ha llegado a ser más profundo para Bank of America, con caídas de hasta el 3% en los cruces de primera hora en Nueva York y del 1,81% al cierre. La entidad financiera se ha apuntado un beneficio neto de 25.998 millones de dólares, un 2,6% menos que al cierre de 2018, cuando el segundo banco estadounidense por activos consiguió récord histórico de ganancias. Aunque los beneficios han estado en línea con lo esperado por los analistas, no han estado a la altura los márgenes de negocio, afectados por las tres bajadas de tipos de interés acometidas por la Fed a lo largo del ejercicio. "La entidad se las arregló bien en un periodo de transición desde subidas de tipos a tasas más bajas en un breve espacio de tiempo", declaró el director financiero Paul Donofrio.
La acogida ha sido más cálida para las cuentas de BlackRock, que ha conseguido subir un 2,17% en bolsa tras publicar ganancias por 4.476 millones de dólares, un 4% más que hace un año. "Los resultados reflejan las inversiones sistemáticas que hemos hecho para construir relaciones con los clientes más amplias y profundas y cumplir sus necesidades", ha subrayado el presidente y consejero delegado de la firma, Laurence Fink. Los ingresos se han estirado hasta los 14.539 millones de dólares y los activos bajo gestión son, por primera vez en su historia, más de 7 billones de dólares, pues a lo largo de 2019 ha conseguido captar 128.800 millones de dólares netos.
Al alza se han movido también los títulos de UnitedHealth, un 2,9% después de haber dado a conocer un beneficio neto anual de 3.540 millones de dólares con los que ha batido las previsiones de los expertos. También ha sumado altura a su gráfica, un sonoro 7,14%, la eléctrica PG&E después de que los analistas de Citigroup hayan recomendado la compra de sus acciones convencidos de que, después de muchas disputas, los fondos activistas presentes en su capital conseguirán forzar ciertos cambios en su gestión para conseguir una mayor eficiencia.
La que ha retrocedido ha sido Tesla, que después de superar los 530 dólares por acción y colocar así a su fundador, Elon Musk, entre las 30 mayores fortunas del mundo, ha corregido un 3,61% hasta los 518,5 dólares, de forma que su capitalizacíón se queda en 93.460 millones tras el pacto entre Pekín y Washington.