El consejo de administración del grupo Volvo ha decidido posponer la celebración de la junta general de accionistas hasta el próximo 30 de junio como consecuencia de la incertidumbre vinculada con la expansión del coronavirus, según informó la empresa en un comunicado.

El objetivo de este retraso es dar más tiempo a la empresa y al consejo para evaluar de una mejor forma lo que está sucediendo en relación al coronavirus.

La corporación explicó que en los últimos días los gobiernos de diferentes países han introducido medidas para reducir el avance del Covid-19 que han "impactado directamente" sobre las operaciones de la empresa y sobre sus clientes.

La firma escandinava indicó que entre las decisiones adoptadas se encuentran el cierre de fronteras, la reducción de la libertad de movimiento de las personas y la suspensión de la actividad en diferentes negocios.

"El consejo está monitorizando de cerca el desarrollo y cómo esta muy difícil situación en la que se encuentra el mundo afectará al grupo Volvo y, en particular, a la demanda de productos y servicios", aseguró el presidente del consejo, Carl-Henric Svanberg.

Demanda más débil

Asimismo, la multinacional recordó que en la actualidad muchas de las factorías que posee la empresa se encuentran cerradas y los trabajadores de varios países han sido suspendidos temporalmente de empleo.

"Los desarrollos recientes tienen un efecto directo sobre economías importantes para el grupo Volvo y la conclusión es que la situación prevaleciente conducirá a una demanda más débil de los productos y servicios del grupo. Como ya se anunció, esto tendrá un efecto negativo importante en el desarrollo financiero del grupo", aseguró la empresa.