Morgan Stanley se suma a la creciente lista de inversores internacionales que están tomando posiciones en IAG aprovechando su reciente desplome bursátil. El banco estadounidense ha declarado posiciones sobre un 5,013% del capital social del grupo de aerolíneas.
La inversión se ha notificado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) este jueves, pero la documentación remitida al supervisor especifica que la posición se alcanzó el pasado 26 de marzo. La posición se distribuye entre una participación del 0,373% en acciones de IAG y el restante 4,64% a través de derivados con derechos de voto asociados.
En un anexo al formulario oficial de participaciones relevantes, Morgan Stanley atribuye íntegra esta posición a su filial británica. En cualquier caso, esta inversión podría estar sujeta a las limitaciones que el Gobierno ha decretado para evitar que compañías o inversores de fuera de la Unión Europea se hagan con participaciones de peso en cotizadas españolas de sectores críticos de la economía, si bien el veto es efectivo solo para la entrada en los consejos de administración e inversiones que rebasen el 10% del capital.
Una lista creciente
Con la misma fecha del 1 de abril, el ‘hedge fund’ Lansdowne Partners International ha declarado un incremento de cartera hasta el 5,013% desde el 4,592% notificado el 17 de marzo. La valoración de este paquete a precios actuales de cotización de IAG en la bolsa española alcanza los 237,67 millones de euros.
El elenco de inversores internacionales que en los últimos días de descalabro bursátil han estrenado o engordado cartera en IAG incluye también al gestor de fondos y filántropo estadounidense Kenneth C. Griffin, que declara un 3,02% del grupo matriz de Iberia.
También la firma Capital Research and Management, con un 4,18%; el fondo especulativo Citadel, con un peso del 2,16% y a la gestora estadounidense Invesco, que detenta una participación del 1,984%.
La semana pasada, el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Jose Luis Ábalos, se mostró contundente a la hora de expresar la intención del Gobierno de proteger a Iberia de la eventual llegada de inversores oportunistas. "Nos preocupa la españolidad de Iberia. La compañía siempre ha contado y contará en el futuro con todo nuestro apoyo".