La carrera por encontrar el medicamento y la vacuna contra el coronavirus no ha hecho más que empezar. Desde que el pasado enero China alertara sobre una pandemia que ya había hecho estragos en su propio país, las farmacéuticas de todo el mundo se han apresurado para dar con la fórmula que pueda frenar el virus en todo el planeta.
Las compañías son conscientes de que encontrar un tratamiento o una vacuna no solo contribuirá a reducir la expansión del Covid-19, sino que les servirá para ganarse el respeto de todo el mundo y para aumentar su facturación a niveles nunca vistos. Así, mientras los gigantes del sector farmacéutico y biotecnológico continúan con su particular guerra por ser los primeros en encontrar la fórmula perfecta contra el coronavirus, los inversores ponen el foco en cada una de estas compañías y en sus avances.
En los mercados todos son conscientes de que, cuando una de estas empresas tenga éxito en sus ensayos, las oportunidades para los inversores habrán terminado. Por eso, tratan de apuntar al activo adecuado, pese a que todavía parece que no existe un claro ganador.
Las compañías, una a una
Gilead Sciences
Una de las grandes sorpresas de este 2020 había sido la de la biotecnológica Gilead Sciences. Los buenos resultados de su fármaco Remdesivir, testado con 53 pacientes, contribuyeron a catapultar su cotización.
Tanto es así que las acciones de la compañía pasaron de tener un valor de 65 dólares al inicio del año a llegar hasta casi los 84 dólares. Las expectativas, que se habían fijado, quizás, demasiado altas se desinflaron esta semana tras una filtración que aseguraba que un nuevo ensayo clínico con este fármaco en China había fracasado. Su cotización llegó a caer hasta los 73 dólares.
Roche
Otra de las compañías que se encuentra inmersa en la carrera es la suiza Roche. En este caso, se trata de la creación de una prueba de anticuerpos, otro de los campos de batalla contra el coronavirus.
La farmacéutica aseguró la semana pasada que ha desarrollado un test que podría empezar a comercializar a principios del mes de mayo con una producción mensual de 100 millones de pruebas a partir de junio. Una de las características de esta prueba es que los resultados estarán disponibles en 18 minutos, lo que supone producir unos 300 resultados por hora.
Los inversores no han tardado en reaccionar. De hecho, la compañía sube casi un 30% desde los mínimos del año que había marcado el pasado mes de marzo. Actualmente, su cotización se encuentra en torno a los 345 francos suizos por acción.
Pfizer y BioNTech
Junto con estas, también sobresalen en la lucha Pfizer y BioNTech. El pasado mes de marzo el gigante estadounidense anunció que se aliaría con la alemana BioNTech, una de las candidatas de la vacuna contra el virus. La intención de ambas es poder empezar con los ensayos clínicos a finales de abril tanto en Alemania como en EEUU.
Para ello, Pfizer pagará 185 millones de dólares por adelantado a la biotecnológica alemana. En lo que va de año, esta última sube casi un 30%, después de haber subido más de un 130% a mediados de marzo tras el anuncio de la alianza con Pfizer, quien, por el momento, cede más de un 6% en este 2020.
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Sanofi y Translate Bio
Otra de las alianzas que se han producido en las últimas semanas ha sido la de Sanofi y Translate Bio. A finales del pasado mes, la francesa Sanofi anunció que colaborará con la estadounidense Translate Bio con el objetivo de desarrollar una vacuna basada en el ARN mensajero, una expresión genética.
Todo ello ha llevado a Translate Bio a cotizar con una subida de más del 30% en lo que va de año. El gigante francés, por su parte, no goza de la misma suerte en los mercados, ya que su cotización se encuentra prácticamente plana en lo que va de 2020, pese a los esfuerzos de la compañía por luchar contra el virus. Y es que, además de aliarse con la estadounidense, Sanofi también está trabajando con otras farmacéuticas como Luminostics o Glaxo para avanzar frente a la pandemia.
Vaxart
Vaxart es sin duda una de las compañías más beneficiadas en bolsa como consecuencia del Covid-19. La empresa biotecnológica, con sede en San Francisco, cotizaba a principios de año en los 0,36 dólares por acción. Desde entonces la compañía ya anunció que estaba desarrollando una vacuna.
No fue hasta marzo cuando se hizo pública su alianza con Emergent Biosolutions, lo que catapultó su cotización. La compañía ha asegurado que comenzará sus ensayos clínicos de su vacuna oral en la segunda mitad de 2020. Esto ha hecho que su cotización supere los 2,6 dólares, es decir, una revalorización desde principios de año de más del 640%.
Johnson & Johnson
El gigante Johnson & Johnson es otro de los candidatos a hacerse con la vacuna contra la pandemia. La estadounidense ya cuenta con un fármaco en ensayos y tiene previsto iniciar la fase 1 de su ensayo clínico en septiembre. Según sus previsiones, el fármaco podría estar disponible a principios de 2021. En lo que va de año la compañía sube en torno al 7%, aunque desde los mínimos que marcó el pasado mes de marzo, se ha revalorizado casi un 40%.
Además de estas compañías también hay diferentes laboratorios europeos que están investigando para frenar el virus. Algunos de ellos son Abbvie, Astellas, Bayer, E-Pharma, Merck o Novartis, aunque por el momento los inversores no han apostado demasiado por ellas.