La toma de decisiones bursátiles al calor de una noticia pocas veces suele ser la mejor opción. Y hoy hemos visto un nuevo caso en todos aquellos inversores que hayan vendido en la apertura asustados por las primeras pérdidas de Inditex desde que este valor cotiza en bolsa.
En estos momentos se estará escribiendo ríos y ríos de tinta y llenando minutos y minutos de radio intentando explicar al lector u oyente del por qué de estos resultados tan negativos y resaltando los puntos fuertes de Inditex.
Esto es precisamente lo que yo quiero evitar hacer. Y no quiero hacerlo de la manera más fácil posible que sería recurriendo a la frase de que toda noticia ya está descontada por el mercado, sino que quiero hacerlo usando el sentido común.
Inditex es la empresa con mayor capitalización de la bolsa española, tanto que su peso en el selectivo español está limitado en un 40%, es como si solo capitalizase el 60% de lo que realmente capitaliza. De esta manera no toma un peso vital en el Ibex e incluso se ve superado por el peso del banco Santander, pero este no es el tema.
El tema hay que centrarlo en las reacciones que tenemos los humanos ante las noticias: unas nos generan avaricia y otras nos generan miedo. Y la de hoy obviamente ha sido de miedo.
Que un gigante como Inditex entre en pérdidas es una hecatombe y como tal hay que salir corriendo del valor porque si ha perdido 409 millones de euros en el primer trimestre del año cuando tan solo estuvimos dos semanas de confinamiento, el palo en los resultados del próximo trimestre van a ser interplanetarios. !Error!
Primer gran error. El inversor suele quedarse en el titular de las noticias y ese es un grave error, primero porque pasará por alto que el primer trimestre del año en Inditex corresponde a los meses de febrero, marzo y abril; y segundo porque te pierdes que las ventas online se han disparado un 50% en su trimestre fiscal e incluso un 95% en el caso del mes de abril en formato interanual.
A fin de cuentas es aplicar el sentido común. Si medio planeta se ha encerrado en sus casas y las tiendas han estado cerradas, lo más normal es que las ventas se desplomen y si tus gastos se mantienen constantes porque has optado por seguir pagando los sueldos de tus empleados entre otras cosas, tengas pérdidas.
Y otro dato muy importante, por fin parece que se han dado cuenta de la importancia del canal de ventas online y por por ello han anunciado un plan de apoyo de 1.000 millones de euros y otros 1.700 para potenciar tecnológicamente a las tiendas físicas.
Y esto parece que más que compensa el anuncio de la congelación del dividendo extraordinario este año y la reducción en un 60% del ordinario.
Por otro lado, si miramos la acción desde el punto de vista técnico no ha ocurrido absolutamente nada.
La semana pasada hicimos techo ante la media móvil de largo plazo en torno a los 27,32 euros y hoy hemos abierto con un hueco bajista importante tras el que nos hemos ido a testear el soporte vital de los 24,50 euros a los 13 segundos de su apertura por esa presión de inversores asustadizos de la que hablaba anteriormente.
Una vez terminada esa avalancha, Inditex ha comenzado recuperar posiciones hasta marcar máximos en los 26,24 euros y robarles las carteras a los inversores que habían salido en la apertura.
Prometí no decir que toda noticia ya está descontada en bolsa, pero no que la historia siempre se repite.