El pesimismo está de vuelta en los mercados. Tres semanas consecutivas al alza han sido suficientes para el Ibex 35, que esta ha vuelto a teñirse de rojo. Y de qué manera. Con caídas del 7,37%, el índice español firma su peor acumulado semanal desde marzo. Su gráfica echa el cierre en los 7.292,7 puntos, con tres de cinco sesiones a la baja.
Los datos macroeconómicos que apuntan a que la recuperación será más lenta de lo esperado no han hecho más que sucederse. El último ingrediente de este cóctel ha sido la producción industrial de la Eurozona, que ha visto la luz este viernes. En abril cayó un histórico 17,3%.
Sin embargo, el lastre más pesado en este terreno lo han puesto las previsiones de la OCDE, que han señalado directamente a España como la economía potencialmente más afectada si hubiera una segunda oleada de contagios por coronavirus. El organismo contempla que el PIB podría caer hasta un 14,4% al término de este 2020.
Si en marzo fue un error de comunicación de Christine Lagarde, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), lo que provocó el desplome de los mercados, esta vez han sido las frágiles previsiones de la Reserva Federal de EEUU (Fed) las que han prendido la mecha del escepticismo en torno a la desescalada.
La insistencia de su presidente, Jerome Powell, en la fragilidad de los primeros síntomas de recuperación y la decisión de mantener los tipos de interés de la primera economía del mundo en mínimos al menos hasta 2022 han hecho mella en las bolsas. Aunque no tanta como hace tres meses, todo sea dicho.
Despedida roja a Mediaset
Al cierre de la sesión de este viernes, un 0,2% al alza después de mucho bamboleo, el rojo de las pérdidas que a primera hora teñía la mayoría de valores se volvía más intenso en Mediaset España, un 3,1% a la baja tras conocerse que abandonará su plaza en el Ibex 35 en favor de Almirall, que ha sumado un 4,3% a su gráfica.
También han caído Indra (-2%) e Inditex (-1,5%), que desanda parte de la remontada al calor de sus cuentas. Los bancos, que a media sesión comandaban la remontada del índice, han terminado teñidos de rojo, con Bankia perdiendo un 0,8%.
Al otro extremo de la tabla de revalorizaciones, la que sí que ha aguantado es IAG, un 4,6% al alza. También ArcelorMittal, un 4,4% arriba. Colonial completaba la terna ganadora, al sumar un 1,8% para su gráfica.
No obstante, algunos pesos pesados como Repsol (+1,2%), Telefónica (+1,1%), que este viernes ha celebrado su junta de accionistas, y BBVA (+1,1%) han subido con energía.
Vuelta al oro y la deuda soberana
El cambio de sentimiento inversor también se ha dejado notar en el mercado de materias primas, donde el petróleo Brent ha retrocedido hacia los 39 dólares, pues en su gráfica también han pesado unos depósitos estadounidenses más repletos de lo esperado. No obstante, el oro ha aguantado por encima de los 1.740 dólares por onza.
Mientras tanto, el euro ha terminado la semana prácticamente como la empezó, en los 1,125 dólares. Y eso a pesar de múltiples vaivenes a consecuencia de los mensajes de la Fed alertando de una contracción del PIB de EEUU de hasta el 6,5% este año.
Por el mercado de deuda soberana, la entrada de dinero inversor a la búsqueda de refugio se ha dejado ver en la profundización del 'bund' en tipos negativos, lo que hace que la prima de riesgo española haya ascendido hasta los 102 puntos básicos a pesar de que la rentabilidad de los bonos nacionales se queda en el 0,59%. Los germanos marcan una rentabilidad a favor de sus arcas públicas del -0,43%.