A falta de unos minutos para las 14:00 horas en la Bolsa de Madrid, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha procedido a suspender la negociación de Abengoa. El organismo ha tomado esta decisión cuando sus acciones se disparaban más de un 60% a la espera de conocer los detalles sobre su rescate financiero.
El rally se repetía tanto en las acciones de clase A (+56,3%) como las de tipo B (+63,2%) antes de la suspensión. La CNMV ha justificado su decisión "por concurrir circunstancias que pudieran perturbar el normal desarrollo de las operaciones sobre los citados valores". Mientras tanto, diversas partes implicadas en el proceso de refinanciación de la compañía iban filtrando detalles del acuerdo que, por segunda vez, libra a la sevillana del abismo de la quiebra financiera.
Así lo han confirmado a Invertia fuentes de organizaciones sindicales que han señalado que las negociaciones se prolongaron hasta la noche de ayer y continuarán a lo largo de este martes. La compañía de infraestructuras y renovables se había marcado este martes 14 de julio como fecha tope para desembarrancar su complicada situación financiera.
Disparadas desde el lunes
Según las citadas fuentes, entre las piezas clave del acuerdo estarían una ampliación de los créditos ICO así como el compromiso de la Junta de Andalucía en inyectar otros 20 millones en la compañía para asegurar su viabilidad financiera.
A pesar del acelerón de las acciones de Abengoa, que ya empezó el lunes, sus precios siguen estando entre los más bajos del parqué madrileño. Las de tipo A han marcado máximos intradía en el 0,017 euros, mientras que las B han llegado a los 0,0065 euros en los cruces más alcistas.
Se espera que su negociación bursátil no se retome hasta que la compañía envíe las pertinentes comunicaciones al supervisor sobre el desenlace de la negociación a contrarreloj con sus acreedores.
En este sentido, fuentes del mercado explican que las comunicaciones definitivas podrían demorarse. Al hecho de que la negociación se habría ido cerrando a lo largo de la mañana de este martes, se suma el que la CNMV no ha usado una coletilla que usa en otras ocasiones similares donde explica que la suspensión es "a la espera de que se difunda una información relevante".
La compañía entró en causa de disolución al cierre del ejercicio pasado, con un agujero patrimonial de 388 millones de euros. Anteriormente, en el año 2016, esquivó la quiebra en el que fue el mayor concurso de acreedores de la historia de España. El convenio firmado entonces para salvar la compañía no ha resultado suficiente a la luz de sus cifras más recientes, que han forzado esta nueva y compleja renegociación.