Suenan de nuevo los tambores de posibles fusiones bancarias y al calor de los rumores, la banca española está recuperando terreno estos días en Bolsa después de las duras pérdidas sufridas en los últimos meses.
Tras la subida de este lunes, las entidades medianas vuelven a ser protagonistas de la jornada en unos días en los que se han detectado movimientos de fondos oportunistas entrando en estos valores para tomar posiciones ante posibles futuros movimientos corporativos.
Sabadell, Bankia, Unicaja y Liberbank están en el foco, pero los movimientos podrían afectar a más entidades.
El banco que preside Josep Oliu encabeza las subidas del Ibex 35 con un avance superior al 4%. Le sigue en el selectivo, Santander y muy cerca Bankia, con una subida a primera hora superior al 2,6%.
BBVA y Bankinter se anotan más del 2%, mientras que Caixabank se aproxima a esa cota.
Fuera del selectivo, pero con un protagonismo importante, Liberbank y Unicaja se benefician de los rumores. Estas dos entidades que intentaron su fusión en una operación que fracasó poco antes de su firma final podrían retomar sus conversaciones en las próximas semanas, según se comenta en el mercado.
La entidad asturiana lleva días disparadas y avanza este martes por encima del 2%, mientras la andaluza coquetea con un avance del 3%.
Las provisiones por el impacto del coronavirus, entre otros, lastraron el beneficio de la banca en el primer semestre del año. Además, el riesgo de que aumente la morosidad hace que la banca mire con preocupación el futuro. Todo ello, en un entorno de tipos de interés en negativo que impiden alcanzar la rentabilidad a las entidades.
Esta situación, unida al avance imparable del negocio digital -que ha experimentado un incremento muy significativo en los últimos meses por el confinamiento- hace que las llamadas a la consolidación bancaria para mejorar la eficiencia que viene haciendo el Banco Central Europeo (BCE) estén siendo escuchadas por las entidades.
Al menos así lo entiende el mercado que está tomando posiciones para aprovechar los precios atractivos de las acciones de un sector que tocó mínimos en julio.