Wall Street se sumó a la remontada. Las compras tiñeron de verde las pantallas de negociación en este arranque semanal marcado por los nuevos avances en materia médica frente al coronavirus y que tienen su origen en AstraZeneca. La expectativa de que la cura a la infección pueda estar algo más cerca despierta el optimismo, que también bebe de la decisión final de Bruselas para la liberación de ayudas comunitarias al desempleo.
El motor de estos avances en la Bolsa de Nueva York estuvo en dos decisiones anunciadas la noche pasada. De una parte, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) anunció la aprobación del tratamiento con plasma con anticuerpos contra la Covid-19 en pacientes infectados con síntomas. De otra parte, la expectativa de que Donald Trump acelere la aprobación de la vacuna que AstraZeneca y la Universidad de Oxford están desarrollando conjuntamente y que, de momento, se ha revelado como la más efectiva y con menos efectos secundarios.
El efecto de estas dos medidas fue inmediato en los mercados. El Dow Jones sumó un 1,4% hasta los 28.308 puntos. Un 1% ganó el S&P 500, que rebasó los 3.431 puntos. El tecnológico Nasdaq remontó un 0,6% y su gráfica rozó los 11.400 puntos.
El índice de actividad nacional de la Fed de Chicago vio la luz antes de la apertura de Wall Street y, con 1,18 puntos positivos, aguanta en terreno expansivo en este mes de agosto que toca a su fin.
Mientras tanto, la Comisión Europea tiene lista su propuesta de reparto de ayudas del seguro comunitario frente al desempleo, SURE, por sus siglas inglesas. Bruselas ha propuesto al Consejo Europeo, que ahora debe dar su visto bueno a la medida, que Italia y España sean los países más beneficiados, por este orden.
La vacuna de AstraZeneca
En lo corporativo, el foco está en los laboratorios AstraZeneca. Las acciones de la compañía cotizadas en Wall Street subieron cerca de un 2% después de conocerse que Trump podría acelerar los permisos para su distribución en EEUU, que sigue siendo uno de los principales focos de contagio mundial. A los inversores no se les escapa que esto podría ser un golpe de efecto para su campaña presidencial en medio de constantes acusaciones de inacción por parte de los demócratas.
La firma de inversión Blackstone también se coloca en la picota. Sus acciones subieron un 0,6% después de que The Wall Street Journal haya publicado este lunes un acuerdo con la japonesa Takeda Pharmaceutical para la compra de su unidad de medicina de consumo por 242.000 millones de yenes, unos 2.300 millones de dólares al cambio.
Más potencial para Tesla
Una vez más, la automovilística Tesla reclamó su protagonismo. Las acciones de la criatura de Elon Musk cedieron hasta los 1.990 dólares con caídas próximas al 1,8% a pesar de que los analistas de Wedbush han elevado su precio objetivo hasta los 3.500 dólares. Sin embargo, esta cota es solo alcanzable por la compañía, advierten, en función de una exigente de la evolución de su negocio en China.