Las bolsas europeas se apuntan al rebote tras los recortes de la sesión precedente. A pesar de que los datos macroeconómicos de primera hora, especialmente el paro español, no eran optimistas, las compras aparecían en escena. Sin embargo, no con la fuerza suficiente como para que el Ibex 35 recuperase los 7.000 enteros. El índice español cerraba con un avance del 0,57% hasta los 6.996,9 puntos. La banca frustraba el intento de reconquista por segunda sesión consecutiva.
El sabor agridulce de los datos de paro de agosto, que daban un nuevo respiro a la economía española, se explica en un incremento de 29.700 personas desempleadas, que sin embargo se traduce en el menor aumento de un octavo mes del año en los últimos cuatro ejercicios. Además, las afiliaciones a la Seguridad Social registraron su primer incremento en toda la serie histórica para este periodo.
Aunque la banca seguía penalizada tras las últimas advertencias del Banco Central Europeo (BCE), la bolsa española consiguía al fin decantarse con algo de decisión por las ganancias gracias al tirón alcista de otros sectores de peso en el índice. Así, Bankinter se quedaba al fondo de la tabla de revalorizaciones, con pérdidas del 4,6%. Muy cerca, el Sabadell se quedaba como farolillo rojo con caídas del 3,8% en el día en que se lanzaba a una emisión de bonos verdes.
Entre los valores que más lastraban la remontada del Ibex 35, BBVA (-3,3%) y CaixaBank (-2,8%). Y a media sesión apenas se dejaban un 1%. También el Santander abundaba en el descenso, un 2,5% abajo una vez que se confirmaba su salida del índice Stoxx Europe 50.
Al cierre, Telefónica conseguía arañar alzas del 0,5% tras conocerse su retirada del EuroStoxx 50, donde el próximo 18 de septiembre perderá su plaza junto con BBVA.
Los avances los capitaneaba Amadeus, que subía un 3,7% después de haber revalidado su puesto -este sí- en el EuroStoxx 50. Otros valores industriales cobraban fuerza en la remontada, como ArcelorMittal (+3,2%) y Ferrovial (+2,7%), siguientes en la tabla. Siemens Gamesa, que ha anunciado un nuevo pedido de turbinas para Marruecos y ha recibido mejoras de consejo inversor, subía un 2,2% al cierre.
Hoy igual que ayer, el índice español demostraba que se siente incapaz de colocarse de nuevo por encima de los 7.000 puntos y desaprovechaba otra ocasión de reconquista de esta importante marca psicológica.
En el mercado de materias primas, el oro se replegaba hasta el entorno de los 1.950 dólares por onza. Mientras tanto, el petróleo Brent retrocedía por debajo de los 45 dólares por barril después de unas cifras de depósitos en Cushing (Oklahoma) por encima de las expectativas.
El euro aflojaba algo de terreno frente a la divisa estadounidense después de haber alcanzado ayer máximos desde la primavera de 2018. El cruce entre ambas monedas era de 1,183 dólares por cada euro al cierre de las bolsas del Viejo Continente.
Por lo que se refiere a la deuda soberana, la prima de riesgo permanece anclada en los 80 puntos básicos. El bono español a diez años renta al 0,35% frente al -0,45% al que desciende el 'bund' alemán contra el que se miden los papeles periféricos.
