Las bolsas europeas lograban el rebote en una sesión huérfana de Wall Street. Mientras que la banca daba bandazos a uno y otro lado de la gráfica, los valores de corte más industrial y energético tiraban al alza de los índices. El Ibex 35 sube un 1,29% hasta los 7.080 puntos, con lo que reconquista los 7.000 enteros después de varias tentativas frustradas, pero no consigue echar el lazo a los 7.100 enteros.
Un dato macroeconómico ayudaba a este impulso alcista desde primera hora, el de exportaciones China. El país asiático sigue dando síntomas de recuperación una vez que el epicentro de la epidemia se ha desplazado hacia afuera de sus fronteras y en agosto exportó un 9,5% más que un año antes, lo que supera en más de dos puntos porcentuales las quinielas más optimistas.
Después, la euforia se relajaba con la cifra de producción industrial de julio en Alemania, que tan solo repuntó un 1,2% frente al 4,7% que se vaticinaba y que ya suponía un sensible retroceso frente al mes anterior. Una advertencia a la cautela en una jornada en la que Wall Street no levantará el cierre por el festivo local del Día del Trabajador.
En la bolsa española, los valores energéticos eran los más pujantes de la sesión. Un 5,7% sumaba Siemens Gamesa, mientras que Naturgy remontaba un 4,7%. Repsol repuntaba un 2,9% y Red Eléctrica ganaba un 2,6%. Entre ellas, se colaba Grifols, un 3,8% al alza.
Los enérgicos avances del sector financiero, que sigue digiriendo el anuncio de posible fusión entre CaixaBank (-1,5%) y Bankia (-1,3%), se moderaban conforme avanzaba la sesión. El que más subía al cierre era el Sabadell, que ganaba un 2% al ser señalado como el próximo banco a participar en una nueva ronda de operaciones corporativas. No obstante, a primera hora incluso superaba el 10% al alza.
Al otro extremo, junto a las dos implicadas en la operación, BBVA caía un 1,3%. Sin embargo, los puestos más rezagados eran para IAG, que se convertía en el farolillo rojo al perder un 5%. Cie Automotive caía un 2,3% al cierre.
En el mercado de materias primas, el petróleo se enfriaba hasta poner en apuros la cota de los 42 dólares por barril en su referencia Brent europea. Mientras tanto, el oro persistía por encima de los 1.930 dólares mientras nuevos informes de análisis sitúan la onza de regreso a los 2.000 'billetes verdes' en los próximos meses.
El euro cedía algo de terreno frente a la moneda americana, de manera que el cambio se quedaba en los 1,182 dólares.
Por el mercado secundario de renta fija, la prima de riesgo subía ligeramente hasta los 82 puntos básicos. El bono español marca tipos del 0,35% frente al -0,47% en el que remataban la sesión los 'bunds' alemanes de referencia.