Deutsche Boerse, el operador de la Bolsa de Fráncfort, ha abierto a consultas una amplia reforma de sus índices de referencia. Entre los cambios que propone, el más destacado es ampliar de 30 a 40 la cesta de valores del índice DAX, el más representativo del mercado alemán.
Este vuelco llega después de que el escándalo de la fintech Wirecard sacudiera con dureza la bolsa alemana y pusiera en entredicho algunos de los estándares empleados hasta la fecha. Tanto es así que en la reforma anunciada este lunes también se contemplan "condiciones más estrictas" para poder formar parte del referido DAX.
El directo ejecutivo de Deutsche Boerse, Theodor Weimer, ya se había mostrado partidario de ampliar la cesta de valores del selectivo alemán en varias ocasiones. En esta misma línea, ha insistido en la importancia de suspender la membresía de un valor si no envía sus cuentas trimestrales en los tiempos exigibles legalmente.
Reducir el MDAX
Junto con el cambio en el DAX, la sociedad rectora también propone reducir desde 60 hasta 50 el número de valores que forman parte del MDAX, el índice de referencia de las compañías de mediana capitalización de la Bolsa de Fráncfort. En este sentido, se busca hacer que sea más representativo para las cotizadas más grandes de este tramo.
Ya en un tono más social, la sociedad ha abierto la puerta a que las compañías cuyas ventas procedan en un 10% de la venta de armas controvertidas no puedan formar parte de ninguno de los índices de referencia del parqué alemán. Esto supondría su veto en los indicadores DAX, MDAX, TecDAX y SDAX, dijo Deutsche Boerse.
El objetivo de Deutsche Boerse es que los cambios puedan aprobarse antes del próximo 23 de noviembre, primer lunes de negociación bursátil tras el vencimiento de derivados del mes que viene. Con este objetivo, las propuestas están abiertas a comentarios de inversores y partícipes del mercado hasta el 4 de noviembre.