Al final han tenido que confirmar lo que era un secreto a voces entre los inversores y reconocer que han retomado las conversaciones del pasado cuando no encontraron un canje que contentase a ambas partes.
Sin embargo, esta vez podría ser diferente porque la fusión anunciada entre CaixaBank y Bankia ha abierto un periodo de fusiones que va a extenderse en el tiempo y a lo largo de todo el territorio español. Muy pronto deberiamos tener nuevas noticias de este noviazgo.
Así que los inversores no se lo han pensando mucho y se han lanzado comprar ambas compañías aunque con una pequeña diferencia entre ambas acciones.
En el caso de las acciones de Liberbank, que podríamos decir que sería la entidad de menor tamaño, el precio de las acciones se ha ido prácticamente ya en la apertura a los niveles de máximos del mes pasado. Y ha sido posteriormente cuando se han marcado nuevos máximos al alcanzar los 0,28 euros.
Sin embargo, esto implica estar hablando de una revalorización ya bastante cercana al 20% que consiguió Bankia por lo que no parece muy coherente sumarse ahora estos precios.
Otra cosa muy distinta es lo que ha ocurrido con las acciones del Unicaja que abrían con un hueco de apertura no muy importante y posteriormente entraba el dinero de los inversores para llevárselo a la zona de los máximos del pasado mes de septiembre y luego romper dicha zona.
En este caso estamos hablando de unas revalorizaciones inferiores a las de Liberbank pero que están teniendo un efecto más evidente en su gráfico.
A pesar de ello, la resistencia de los 0,74 euros es muy importante y la consigna sería evitar en este valor mientras que no víesemos cierres sostenidos por encima de dicho nivel ya que éste se corresponde con niveles técnico importantes no mostrados en el gráfico anterior como el gran hueco bajista del pasado mes de marzo y niveles evidentes de soporte y resistencia del pasado verano 2019.