Las socimis españolas gozan de buena salud financiera y muestra de ello es que repartieron dividendos en 2019 por valor de 1.254 millones de euros, lo que supone un crecimiento de más del 60% respecto al ejercicio anterior.
La segunda edición del informe de elaboración conjunta entre BME y JLL España sobre la evolución del mercado de las Sociedades Anónimas Cotizadas de Inversión Inmobiliaria (socimis) señala que de esta cifra de dividendos, 816 millones de euros han sido repartidos entre las 75 socimis incluidas en BME Growth (el antiguo Mercado Alternativo Bursátil) y los 437 millones restantes han sido pagados por las cuatro socimis del mercado continuo. Por tanto la rentabilidad por dividendo fue de 6,2% y del 3,4%, respectivamente.
En términos de negocio, a cierre de 2019 las socimis registraron ingresos por rentas de 2.060 millones (+8% frente al mismo perímetro para el año anterior) y un ebitda incluyendo ventas de activos, de 1.700 millones, lo que supone un 22% de incremento frente al año anterior.
En relación al beneficio neto, el informe de JLL y BME señala que se alcanzaron los 2.500 millones de euros, (+11%) y una generación de caja neta superior a los 500 millones de euros. Son las socimis de BME Growth las que presentaron mayores ingresos (1.100 millones) y ebitda (718 millones) aunque un menor beneficio neto (887 millones).
El conjunto de las carteras de activos propiedad de las socimis superó, a cierre de 2019, los 51.000 millones de euros, lo que supone un incremento del 12% en términos de Valor Bruto de Activos (GAV) y de un 17% en términos de Valor Neto de Activos (NAV) descontando la deuda y obligaciones de pago.
Mejor no tocar
El director gerente de BME Growth, Jesús González Nieto-Márquez, ha asegurado durante la presentación del informe este miércoles en el Palacio de la Bolsa de Madrid que “las socimis juegan un papel protagonista en el mercado inmobiliario, al que aportan una capacidad extra de atraer financiación y más transparencia”. De la misma manera ha enfatizado su papel en el mercado financiero, “que gracias a estos vehículos cuenta con productos de inversión ligados al alquiler inmobiliario y una mayor diversificación de riesgos en las carteras de los inversores”.
En este sentido, Alberto Segurado, director de Deuda y Finanzas Corporativas de JLL España, ha destacado que las socimis “siguen siendo un mercado tremendamente atractivo para los inversores”. Sin embargo, ha pedido que “no pongamos piedras en el camino”, en referencia al anuncio que hizo el Gobierno este martes sobre cambios en su tributación. Solo hay que ver la repercusión de la noticia en su cotización.
De ahí que Diego Armero Montes, socio de Uría Menéndez, haya señalado que “en los próximos años, el éxito del modelo dependerá de que nuestras instituciones den seguridad jurídica y cierta flexibilidad en el cumplimiento de los requisitos de carácter tributario y regulatorio, en línea con la práctica de otros países de nuestro entorno”.
Alberto Segurado ha indicado que “el mercado de los vehículos inmobiliarios socimis ha ido creciendo cada año en número y valor, constituyéndose como uno de los actores más importantes en el panorama del sector inmobilairio patrimonial con independencia de los segmentos inmobiliairios que se trate”.
Castigo en bolsa
Las cinco primeras socimis agrupadas por capitalización bursátil representan más del 62% del conjunto del mercado, alcanzando las diez primeras un 75% de la totalidad del mercado. Hay que descender hasta las treinta primeras socimis– lo que supone un 38% del número de vehículos cotizados – para obtener el 90% del valor total.
A pesar de la buena salud del conjunto de las socimis, no han sido ajenas a la evolución de las empresas cotizadas por el efecto de la pandemia. En diciembre de 2019, las socimis registraron una capitalización bursátil de 25.733 millones de euros, en un rally que condujo a que el conjunto de estas sociedades alcanzara su cénit en términos de valor de mercado durante los primeros meses de 2020. A cierre de junio, el valor de mercado se sitúo en 21.268 millones de euros, lo que supone un descenso superior al 17% (4.400 millones de euros).
Este descenso en términos de valor se ha centrado en aquellos vehículos que cotizan en el mercado continuo como consecuencia de una mayor liquidez y profundidad en la negociación de sus acciones, apunta el informe. De hecho, las socimis incluidas en el índice Ibex 35 han perdido entre un 40 y un 50% de valor bursátil.
Jesús González Nieto-Márquez, a modo de resumen, ha incidido en que “debemos sentirnos satisfechos porque las socimis han cumplido los objetivos, están siendo un vehículo de éxito y van a ir ganado en tamaño para consolidar el sector”.