Banco Sabadell se desplomaba en bolsa este viernes después de haber anunciado a primera hora que no habrá fusión con BBVA. Ambas entidades han explicado antes de la apertura del parqué que no ha habido acuerdo sobre la ecuación de canje, lo que se traducía en caídas de hasta el 18% para el vallesano.
En los cruces más bajistas de la apertura, el Sabadell llegaba a caer hasta los 33 céntimos de euro. Después de estos fuertes retrocesos, las acciones de la entidad seguían al fondo del índice Ibex 35, aunque al cierre moderaban sus descensos al 13,6% en los 0,348 euros.
Mientras tanto, los inversores premiaban a BBVA, cuyo consejero delegado ya había enfriado las posibilidades de fusión hace unos días. La entidad cerraba la sesión con subidas del 4,99% al frente del índice mientras los analistas seguían muy pendientes de conocer qué hará ahora la entidad con el capital obtenido con la venta de su negocio en EEUU a PNC Financial.
Por su parte, el Sabadell anunciaba que el año que viene lanzará un plan estratégico para guiar su senda en solitario. Según ha detallado, incluirá un nuevo plan de negocio que buscará "priorizar el mercado doméstico como clave para incrementar la eficiencia en el uso del capital y los recursos del grupo".
No obstante, parece que el mercado no da la operación por perdida y en ambos casos los inversores y analistas siguen haciendo cábalas de cuál podría ser en adelante la pareja de baile de cada una de estas entidades ahora que han roto entre ellas. En este sentido, el hecho de que las negociaciones se hayan roto por una cuestión de valoración y no de gobernanza o de factores de negocio, hace más factible este horizonte.
Planes de futuro
Además, el foco puesto en el mercado doméstico hace pensar en que quizá el Sabadell podría mover ficha con su filial británica TSB. Aquí, el vallesano apunta hacia el análisis de "alternativas estratégicas" con el objetivo de "ampliar" la eficiencia del grupo y avanzar en la "transformación del mercado retail en España".
Aunque, sin comunicación oficial, se había conocido que ambas entidades habían avanzado en la mayor parte de los términos del acuerdo, incluido el reparto de poder que podría incluir una presidencia para Carlos Torres (actual presidente del BBVA) y una vicepresidencia para Josep Oliu (presidente del Sabadell).