Wall Street arrancaba la semana de Navidad con tono mixto pese a una apertura marcada por las pérdidas. El esperado acuerdo para la liberación de ayudas y subsidios por 900.000 millones de dólares finalmente ha visto la luz en el Congreso y aliviaba los miedos al impacto que tendrá la nueva cepa de la Covid-19 detectada en Reino Unido.
La confirmación del acuerdo entre demócratas y republicanos para el reparto de nuevos subsidios de urgencia para parados y empresas en dificultades financieras se quedaba sin buena parte del efecto previsto en la bolsa americana. El revulsivo que se descontaba para esta medida, perdía potencia frente al temor a una recuperación económica más accidentada y la posible reintroducción de confinamientos estrictos.
Con este escenario, Wall Street tomaba solo en parte el testigo bajista de las bolsas europeas. El Dow Jones sumaba a contracorriente un 0,12% hasta los 30.216 puntos. Un 0,39% se dejaba el S&P 500 que, más penalizado a primera hora, se apeaba de los 3.700 puntos por un margen de solo cinco. El tecnológico Nasdaq no conseguía resistir y desciendía un 0,1% hasta los 12.742 puntos.
Desde el ámbito macro, no veía la luz ninguna referencia para aliviar el escepticismo reinante. El índice de actividad nacional de la Fed de Chicago caía hasta los 0,27 puntos en su lectura de noviembre, muy lejos del 1,01 conseguido el mes precedente. Y, además, se trata de una referencia que suele tener poco calado en el mercado.
Los analistas aguardaban ya a las próximas dos sesiones, donde verán la luz el índice de Confianza del Consumidor de la Universidad de Michigan y también la lectura tercera y definitiva del PIB del tercer trimestre de la mayor economía del mundo.
Autorización y estreno
El foco de la sesión estaba en la farmacéutica Pfizer (-0,8%), que este lunes recibía el visto bueno de la Agencia Europea del Medicamento (AEM) para su vacuna frente a la Covid-19. El antígeno, desarrollado en colaboración con la biofarmacéutica alemana BioNTech (+2,1%), lograba así cierta ventaja frente a sus rivales. Se espera que el sábado empiece su distribución por el Viejo Continente para que el mismo lunes empiece su aplicación a pacientes en varios países como España.
La automovilística Tesla era noticia por su estreno en el S&P 500. Los malos augurios que la aparición de la cepa británica del coronavirus traían para el devenir de la economía se traducían en caídas del 6,5% para la compañía en su deslucido debut en el índice estadounidense. En lo que va de año, la firma ha multiplicado por siete su cotización.
Sector inmobiliario
La tecnológica RealPage se disparaba un 28,8% al convertirse en blanco de multitud de órdenes de compra tras conocerse que el fondo de inversión Thoma Bravo ha alcanzado un acuerdo para hacerse con la compañía por 9.039 millones de dólares. El precio acordado, de 88,75 dólares en efectivo por cada acción en la especialista de datos del mercado inmobiliario supone una prima del 27,8% frente al máximo histórico de la compañía.
No era la única operación relacionada con el 'ladrillo' que este lunes destacaba en Wall Street. Monmouth Real Estate subía un 4,2% después de haber anunciado que ha recibido una oferta hostil del fondo Blackwells Capital para hacerse con su control por 1.770 millones de dólares. Este importe suponía una prima del 6% frente a su cierre del viernes.
Golpe británico
Por otro lado, el banco Charles Schwab (-0,4%) era protagonista una vez que se ha conocido que la Autoridad de Conducta Financiera de Reino Unido (FCA, por sus siglas en inglés) ha decidido multar con 8,96 millones de libras a la filial británica del grupo estadounidense por mala praxis en la protección e información a sus clientes.