Es obvio que ver al selectivo español por debajo de los 8.000 puntos no es el mejor escenario para plantearse el ver valores que puedan romper sus resistencias sino más bien lo contrario ya que tenemos multitud de valores perforando a la baja sus correspondientes soportes.
Pero el que haya valores pegados a las resistencias como es el caso de las acciones de Repsol también nos dan una doble oportunidad a corto plazo ya que, contra toda lógica podrían romper resistencias y esto puede ser aprovechado para comprar más acciones o entrar si no estamos dentro de la acción con anterioridad o en este último caso también para poder salir airosos si efectivamente el precio de la acción se gira definitivamente ante la resistencia y comienza a corregir al igual que el mercado.
Y es precisamente este segundo caso el que debe preocupar a los actuales accionistas de la petrolera española ya que al estar el precio contenido en un canal lateral y estar ahora en la parte alta de él, el precio puede irse rápidamente a la parte de la base de éste.
Por lo tanto, de no frenarse la caída en el mercado español de manera global constatada con una recuperación de los 8.000 puntos mejor en la sesión de hoy viernes que la próxima semana, el riesgo de alejamiento de la zona de los 9 euros y con ellos de la zona superior del canal de lateralidad en Repsol es elevado.
De hecho, el que marquemos nuevos mínimos por debajo de los marcados en la sesión de hoy en los 8,6 euros ya sería una clara señal de sus intenciones de irse a la base del canal que quedarían certificadas con la pérdida posterior de la media móvil de medio plazo que actualmente pasa por los 8,47 euros.
Así que es momento de extremar la precaución si efectivamente el selectivo español no consigue seguir con la recuperación de los puntos para reconquistar el psicológico de los 8.000 puntos.