Despacito, pero con buena letra. Así remontó el Ibex 35 en esta segunda semana de marzo hasta apuntarse una revalorización acumulada del 4,32% gracias a un pleno alcista que el índice no conseguía desde el arranque de febrero. Su último cruce, en los 8.644,5 puntos. Nuevos máximos de los últimos 12 meses para el selectivo.

A pesar de los vaivenes que gobernaron todas y cada una de las sesiones de la semana en las bolsas europeas, el Ibex 35 logró apoyarse en su marcado carácter cíclico para cerrar en verde todas y cada una de ellas. Los crecientes miedos a un repunte de la inflación que haga peligrar el efecto de los estímulos fiscales y monetarios desplegados a lo largo y ancho del mundo no supusieron esta vez un obstáculo para la renta variable, que en Wall Street -léase Dow Jones- y Fráncfort -DAX- llegó a marcar nuevos máximos históricos.

Una de las claves de este ascenso en el índice rey de la bolsa provino directamente de la plaza financiera alemana. El jueves, el Banco Central Europeo (BCE) lanzó un contundente mensaje para defender la eficacia de sus herramientas desplegadas hasta la fecha para acelerar la recuperación de la economía sin sobrecalentarla. Además, la promesa de intensificar las compras de bonos a través de su programa pandémico (PEPP) en el próximo trimestre frenó en seco la rentabilidad de los bonos.

En plena resaca tras la comparecencia de Christine Lagarde, la última sesión de la semana acabó con subidas del 0,6% para el índice español. De nuevo, un repunte tímido pero suficiente para atacar los 8.600 puntos que con en la apertura se dieron totalmente por perdidos. No obstante, y a pesar de esto, el camino para recuperar precios previos al estallido de la pandemia en Europa suponía todavía un 14,3%.

Y todo esto sin olvidar que fue precisamente hace un año cuando un traspié dialéctico de la exministra francesa propinó al Ibex 35 su peor sesión de la historia, con un desplome de nada menos que el 14%. Desde el umbral al que entonces cayó el selectivo español, en los 6.390 puntos, la remontada alcanzó un 35% con su último precio de este viernes.

Inditex, motor alcista

Uno de los motores de la remontada del selectivo español en la última semana era Inditex, que acumuló subidas del 8,8% después de haber presentado sus cuentas anuales. Además, la gigante textil confirmó su política de reparto de dividendo y anunció un ritmo más ágil para su plan de transformación digital.

Sin embargo, fue la renovable Solaria la que repuntó con más fuerza (+9,3%) después de semanas de castigo. ArcelorMittal (+7,8%), Siemens Gamesa (+6,4%) y Cellnex (+6,1%) completaron la parte alta de la tabla de revalorizaciones.

Castigo para Meliá

Al otro extremo, Meliá Hotels sufrió retrocesos próximos al 4% ante el regreso de cierres perimetrales en España y otros países para contener el avance de la pandemia. Y eso que logró salvar su plaza en el Ibex 35. Un 3% cayó Bankia a las puertas de su fusión con CaixaBank (-1,7%) y Repsol sacó poca tajada de la continuidad alcista del petróleo con caídas del 2,6% en la semana.

Telefónica recupera los 4 euros

En cuanto a la última sesión de la semana, los bancos se convirtieron en protagonistas del giro alcista de un índice que a primera hora apuntó a la corrección bajista. Un 3,4% sumó Banco Sabadell, mientras que Bankia (+3,1%), Mapfre (+2,7%) y CaixaBank (+2,3%) también sumaron fuerza al repunte.

A la remontada contribuyeron también otros valores con más peso como ArcelorMittal (+3,1%), BBVA (+2,2%), Repsol (+2%) y Banco Santander (+1,9%). Mención especial para Telefónica, que un 0,7% arriba coronó los 4 euros, una cota que no visitaba desde julio del año pasado.

En sentido opuesto, Cellnex (-1,9%), Cie Automotive (-1,7%) y Solaria (-1,4%) se colocaron en el vagón colista del selectivo.

El BCE cala en el bono

Por el mercado secundario de deuda, el mensaje del BCE caló con fuerza y la rentabilidad del bono español a diez años retrocedió hasta el entorno del 0,3%. No obstante, despidió la semana ligeramente por encima de los mínimos de un mes que tocó la víspera. La prima de riesgo se quedó en los 63 puntos básicos frente a un 'bund' alemán que marcó tipos del -0,3%.