El animado baile de sillas en el capital de Fluidra suma un nuevo movimiento. El vicepresidente de la compañía de piscinas, Óscar Serra Ruffo, ha comunicado la venta de un paquete representativo de un 0,5% de las acciones del grupo por algo más de 25 millones de euros. Una operación que se produce con la compañía en máximos históricos.
La transacción se celebró el pasado 16 de marzo, según consta en el formulario que Serra Ruffo ha enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en su condición de miembro del consejo de administración de Fluidra. En el documento se recoge también que la venta tuvo lugar fuera del mercado oficial español. En su lugar, se produjo en uno de los libros de órdenes opacas de la plataforma CBOE Europe (CEUX).
En concreto, el vicepresidente de Fluidra se deshizo de 1,05 millones de acciones de la compañía. Por cada una de ellas consiguió un precio de 23,8 euros, según figura también en la documentación remitida al supervisor español. Este precio se quedó un 1,45% por debajo de los 24,15 euros por acción a los que el día de la operación la compañía cerró en la bolsa española.
Máximos históricos
Aquel 16 de marzo, la compañía catalana de piscinas sumó un 1,9% a su gráfica y alcanzó por primera vez cotizaciones superiores a los 24 euros al cierre de sesión. Un nuevo hito en el continuado ascenso a máximos históricos de una cotizada que en lo que va de año suma un 14,6% a su gráfica y se revaloriza un 155% en los últimos 12 meses.
Como consecuencia de esta venta, ejecutada a través de Boyser SL, la sociedad mediante la que Serra Ruffo aglutina su inversión en Fluidra, es de esperar que haya descendido la participación que hasta la fecha venía declarando en su capital social. El empresario y miembro de la familia fundadora de La Casera notifica al supervisor, invariable desde febrero de 2019, un 8,13% de las acciones de la compañía.
Detrás de Rhône Capital
Esta sociedad es, además, una de las integrantes del pacto de sindicatura de las familias accionistas históricas de Fluidra. En su última notificación al supervisor, con la misma fecha de febrero de hace dos años, daban cuenta de aglutinar un 25% de su capital social, si bien este paquete no recoge por completo todas y cada una de las posiciones individuales de sus miembros.
En los últimos meses, a consecuencia de dos colocaciones aceleradas entre inversores institucionales promovidas por la gestora estadounidense Rhône Capital, el mapa accionarial de Fluidra ha experimentado varias alteraciones. La primera de ellas, que esta firma ya solo es titular de un 21,48% del capital de la cotizada española.
A consecuencia de estos pasos por caja, también han llegado otros inversores. Entre ellos, la gestora británica Threadneedle, que declara un 3,28% de las acciones de la compañía de piscinas. También ha llegado, y con un paquete más abultado, la empresaria Carmen Godia, que a través de G3T SL se reconoce como titular de un 3,86% de la cotizada.