Por qué es tan importante la educación financiera
Creo que todos estaremos de acuerdo al decir que nuestra vida ha cambiado de alguna manera desde que comenzó la pandemia. Además de la tragedia sanitaria de la que todos somos conscientes, muchas personas perdieron sus empleos y otros tuvieron que plantearse nuevas formas de ganar dinero.
De repente, una fórmula que creíamos que funcionaba, dejó de hacerlo. Fue en ese momento, cuando las personas comenzaron a buscar nuevas realidades que encajasen más con sus necesidades. En consecuencia, las fintechs y especialmente las plataformas de inversión, obtuvieron una gran relevancia.
Sin embargo, para dar un buen servicio a la sociedad, no solo vale con ofrecer un producto sencillo y accesible, las plataformas también deben fomentar la educación financiera. Una asignatura que, en España, por desgracia, no logramos aprobar. Especialmente, los más jóvenes, aquellos entre los 18 y los 34 años, son el grupo que más necesita mejorar.
Solo tenemos que encender la televisión para ver cómo la mayoría de gurús financieros son hombres de mediana edad
Más allá de lo importante que es proporcionar nuevas herramientas y tecnología para que los usuarios puedan invertir sin dificultades, el aprendizaje y la motivación inicial tiene que venir del propio inversor. Es primordial que den este paso, especialmente mientras la economía y la gestión de las finanzas personales sigan desaparecidas de los colegios.
Aunque comienza a haber movimientos en la dirección correcta, es clave conseguir motivar a las nuevas generaciones para que se tomen en serio la educación financiera y no la dejen de lado. A todos nos cuesta dedicar horas de nuestro tiempo libre a aprender en vez de a estar con amigos. Pero los jóvenes deben ser conscientes de su futuro. España es uno de los países en los que más tarde nos emancipamos. Durante unos años, trabajamos mientras vivimos con nuestros padres, no tenemos grandes responsabilidades y comenzamos a ahorrar dinero. Es el momento perfecto para iniciarse en la inversión.
Pero para empezar a invertir, primero hay que tener una serie de conocimientos que sirvan de guía durante los primeros pasos en este mundo. Por esta razón, sería prudente e importante que los jóvenes y los futuros inversores de más edad empezaran a leer sobre los aspectos básicos, tal vez aburridos, como la historia y el funcionamiento del mercado de valores o del bitcoin, mientras amplían sus conocimientos con vídeos en YouTube o TikTok.
También, es importante que antes de invertir, cada uno sea consciente de su propia situación financiera y entienda su presupuesto y objetivos. Solo cuando tengan un colchón y unas ideas claras deberían comenzar a invertir. Es importante que estas nuevas generaciones comprendan que accesibilidad y sencillez no son sinónimos de casino y dinero fácil.
Durante unos años trabajamos mientras vivimos con nuestros padres; es el momento perfecto para iniciarse en la inversión
Es evidente que todavía existe una gran diferencia en conocimientos financieros según el sexo y la situación económica. Solo tenemos que encender la televisión para ver cómo la mayoría de gurús financieros son hombres de mediana edad. Tampoco es difícil entender por qué: Se ha hecho creer que las finanzas y la inversión son complicadas y hechas para ricos y gente muy inteligente.
Unas diferencias que no deberían existir y unas suposiciones que el movimiento protagonizado por los neobrókeres ha demostrado que son rotundamente falsas. Todos podemos invertir sin importar cuánto dinero tengamos.
Es hora de que rompamos con todos los prejuicios relacionados con la inversión, aprendamos y obtengamos conocimientos financieros para poder sacar el máximo rendimiento a nuestro dinero. Un cambio que, aunque debe ser protagonizado por uno mismo, también debe contar con el apoyo de los organismos y entidades públicas, así como de aquellos influencers o líderes de opinión con los que las nuevas generaciones pasan sus horas libres.
Estoy seguro de que estamos viviendo una revolución que traerá consigo una sociedad más educada, más concienciada y con un mayor conocimiento sobre cómo gestionar sus finanzas.
***Alejandro Zala es director de Bitpanda para España